DISCRIMINACIÓN DE GÉNERO GÉNESIS DE LA MUERTE ESPERANZA DE VIDA
Dos de cada tres fallecidos, son hombres Un poco por debajo del resto de la región Morimos sobre todo y ante todo, de viejos
Dicho de forma un tanto sarcástica, la muerte es discriminatoria por causas de género, puesto que según la frialdad de las estadísticas y redondeando los datos, de los más de 1.100 fallecidos a penas 400 son mujeres. Si tuviese que establecerse un perfil del fallecido en el Bierzo es claramente de un hombre, en torno a los 70 años o más, que muere casi dos veces más en número que la mujer. En este aspecto, los datos no difieren mucho de cifras del resto de Castilla y León y de España. Las cifras de esperanza de vida varían cada año que pasan. Siempre se habla de Japón o Castilla y León, como ejemplos o paradigmas de mayor esperanza de vida humana. Pues bien, en el Bierzo, las edades se acortan un poco, el hombre muere en torno a los 75 años. El género femenino vive casi una década más. A partir de los 80 años es cuando se registran más muertes de féminas. Se tiende a morir con más edad. Muy pocos pasan de los 90 años y casi nadie, llega a los 100. Sin embargo, el club de los centenarios existe, y cada vez más. A pesar de los fallos coronarios, de los tumores malignos, de los accidentes de tráfico, de las enfermedades mentales en claro ascenso y de un sin fin de factores más; las cifras no dejan lugar a dudas, en el Bierzo morimos sobre todo y ante todo, de viejos. Son muy traumáticas y por ello muy comentadas las muertes de personas jóvenes o a una temprana edad, pero de las más de mil muertes contabilizadas la mitad prácticamente se registraron en personas de la llamada «tercera edad».