Los vecinos de Boeza denuncian el robo de sus fincas para una forestación

Más de una docena de afectados del pueblo de Boeza, entre los que se encuentra la Junta Vecinal, se movilizaron ayer para exigir la rápida reparación y devolución de casi cuarenta hectáreas que han sido ocupadas ilegalmente por labores de reforestación en el término de Boeza. Los perjudicados por la ocupación de los terrenos se reunieron por la mañana para recorrer el área que ya ha sido removida para una posterior reforestación, terrenos en los que se encuentran sus fincas particulares. Como vocal de los afectados, José Luis Fernández Vega, ganadero de la localidad, aseguró que las fincas ocupadas tienen sus propietarios legales con los que, dicen, no se ha contado para nada. «Vino un representante de una empresa minera y se adueñó de fincas particulares. A mi madre le quitaron una finca sin saber por qué ni porqué no», apostilló Fernández. Asimismo, destacó que los terrenos pertenecen a una zona ganadera, por lo que lo que están consiguiendo con actuaciones de este tipo es eliminar los pastos. Jesús, un joven propietario local aseguró que en su caso le habían ocupado 19 fincas «dos de ellas plantadas de pinos hace dos años, y nadie da ninguna explicación» aseguró. Nabor, otro de los propietarios, denunciaba la usurpación de dos fincas que habían sido propiedad de su madre y que él le compró hace años. «Tengo la relación y yo pagué la contribución rústica de esas fincas en 2003, no entiendo quien ni porqué le ha autorizado a nadie a ocuparlas». Terrenos privados y comunales La zona de mayor actuación, una extensión de casi 40 hectáreas, ya totalmente removida, ocupa terrenos pertenecientes a la Junta Vecinal de Boeza, «terrenos comunales» y varias fincas de los particulares que han hecho pública su protesta. Una de las afectadas por la ocupación de estos terrenos recordaba que «esta zona hace ya tiempo estaba llena de patatales, todos ellos de familias del pueblo, y ahora nos las quitan sin más. Por esta razón queremos una explicación, una disculpa y que nos devuelvan lo que es nuestro», apostilló.