Riesco acusa al PSOE de poner en peligro el empleo en La Rosaleda

El alcalde de Ponferrada volvió ayer a hablar del fallo judicial del TSJ que cuestiona la legalidad del planeamiento urbanístico del barrio de La Rosaleda, por haber sido autorizada por la Junta y el Ayuntamiento una menor dotación de equipamiento público en relación con las 5.000 nuevas viviendas permitidas. Y lo hizo, primero, para lanzar de nuevo un mensaje de absoluta tranquilidad; segundo, para llamar irresponsables al PSOE y a sus portavoces, por intentar «embarullar» la vida municipal y jugar de forma intencionada con los sentimientos de quienes han comprado o piensan comprar un piso en dicha zona de expansión de la ciudad; y en tercer lugar, para advertir que con la postura de los socialistas se está «poniendo en riesgo» el trabajo de muchas personas que laboran en La Rosaleda de manera directa o indirecta, en un amplio abanico que va desde los constructores hasta los vendedores de muebles. «No hay absolutamente ningún problema y quiero, ante la insistencia del PSOE, lanzar un mensaje de absoluta tranquilidad; para los que compraron o para los que van a comprar no pasa nada», remarcó con insistencia Carlos López Riesco, quien dijo ser consciente de que la labor de acoso y derribo sin fundamento, emprendida por el PSOE con este tema, está generando «cierta preocupación» entre los que desconocen el caso. El alcalde fue más allá: «Se está poniendo voluntaria, innecesaria e irresponsablemente en riesgo muchos puestos de trabajo; y eso lo está haciendo un señor, que se llama Ricardo González Saavedra, que tiene bigote, afortunadamente, porque si no fuera por el bigote pensaría que habla Charo Velasco».