Doctor Jekyll y Mister Hyde
COMO MAESTRO que es su retórica es pedagógica y convincente. Ya en su etapa comunista, con otro gran orador al lado, el camarada «Tanque», eran el dúo más dinámico del grupo mixto del Consistorio ponferradino años atrás. Pero luego de Izquierda Unida vino la Nueva Izquierda. Fue entonces cuando el maestro dejó su etapa de alumno en las lides políticas locales para dar un paso al frente más. Siempre al frente, nunca atrás. Y entró, no por la puerta de atrás, ni por la principal, más bien como uno más en la sede de General Vives del Partido Socialista de Ponferrada. La travesía en el desierto estaba al fin culminada. Ahora había que hacerse hueco. Siempre al frente, nunca atrás. Su experiencia neocomunista institucional, su verbigracia y ciertas dotes naturales ayudaron para buscarse un cómodo lugar en las huestes de Charo Velasco en el Ayuntamiento. Pero seguía en la oposición y había que dar un paso al frente, nunca atrás. Al fin, en el Consejo Comarcal del Bierzo encontró su huevo, su nave que pilotar. Jamás el Consejo ha tenido tanta actividad, ha logrado competencias, fondos y un cierto respeto institucional. Pero, ay la política, siempre obligando a tomar decisiones difíciles. El grupo socialista municipal se quedó sin líder, sin portavoz. Él no se lo pensó dos veces y volvió su vista al Ayuntamiento de Ponferrada una vez más, pero esta vez como jefe de oposición. Dentro del PSOE han asentido de momento. No surge nadie con fuerza. Fuera del PSOE se ha ganado ser una de las cabezas referentes del socialismo berciano. Pero en este largo viaje al poder, quizás es cierto que la máxima institución comarcal se está resintiendo ante la falta de un capitán que no está al frente al cien por cien de la nave. Cuando se viste de oposición local se transforma en míster Hade. No da tregua. El furibundo ataque, ahora por la cuestión de La Rosaleda, es buena prueba de ello. Siempre al frente, nunca atrás. Cuando se viste de máximo representante berciano vuelve a transformarse en el hombre sensato, dialogante con las instituciones a las que pide competencias y financiación, domador por medio de encantos personales de los alcaldes díscolos hacia el Consejo. Cuando estás con él, te embarga la duda: ¿Estas con Jekyll o con Hyde? Con el del talante o con el del látigo. En todo caso, el año que viene es muy importante para saber si la doble personalidad la podrá seguir sobrellevando hasta el final de la legislatura.