Objetivo: la mejor fiesta del año

Llega la noche con más magia del año y en el fondo, la más esperada por todos. Para ese momento tan especial del cambio del año se nos presentan infinidad de opciones de diversión que nos permiten celebrarlo a nuestro gusto y con aquellos con quien más deseemos compartirlo. Ponferrada cuenta con un amplísimo abanico de posibilidades que abarcan todos los gustos, edades y bolsillos. Si la decisión de cómo pasar la nochevieja aún no está tomada, ahí va un buen menú de sugerencias. Los cotillones son una forma de celebración que se han convertido en indispensables del fin de año. Sus características comunes son la barra libre, existencia de ropero, seguridad, canapés y algunas ofrecen chocolate con churros a última hora de la noche. Los precios en Ponferrada se sitúan entre los 36 y los 45 euros. Para los más jóvenes, la fiesta del Plantío Bar es una buena posibilidad, al precio de 40 euros. Para los grupos de gente joven, situados entre los 25 y los 35 años, las opciones aumentan. Por un lado, la fiesta del Ponferrada Park, que tiene un precio de 36 euros. Además, La Buena Vida, el Guiñol y el Odeón abren sus puertas de manera conjunta a los que quieran disfrutar de tres ambientes diferentes y elegantes, cada uno con su personalidad y vestidos todos de la música divertida y desenfadada propia de la nochevieja. El precio para estos tres locales es de 45 euros. Además, otra opción es acudir a una de las más veteranas, la fiesta que dan el Paso, el Cotton y el Malecón, tres ambientes muy variados. Al lado mismo, otra fiesta, la de La Manzana. En este caso se trata de cinco locales unidos por una carpa exterior acondicionada que se llenarán de música variada, desde tecno hasta música española de los setenta y los ochenta. Para los que no quieren ir a cotillón, la oferta es también muy variada. Son muchos los locales que optan por abrir esa noche como una más, sin establecer ninguna entrada para acceder a la fiesta. Por ejemplo, en la zona baja, La Bahía de Sam, el Badulake o el Budda. En el caso del casco antiguo, los propietarios de los establecimientos se han unido para abrir de manera colectiva sin establecer entrada, pero dando copas de champán y canapés a los asistentes. De esta iniciativa forman parte el Jazz Machine, La Gatera, el Chelsea, el Tararí, la Escandalera, La Galería, el Edesa y el Bombardier. Los que elijan esta opción podrán disfrutar de muy variados ambientes hasta última hora de la noche y con libertad de entrada. Con cena incluida Para el público más mayor y para las familias, la oferta incluye suculentos menús basados en los que no falta de nada, ni las tradicionales uvas. En este campo las posibilidades son muy amplias. Por ejemplo, la cena del Ponferrada Plaza, por 90 euros, la del Hotel Madrid, por 70 euros, o la del Hotel Temple, al precio de 68 euros. Todas estas cenas incluyen cotillón posterior en los salones y discotecas de los propios locales, en el que no faltan las bolsitas de regalos y la música más actual para pasar una noche divertida, la más divertida.