Una vida cruda en clave de humor

Sobre el escenario del Teatro Bergidum confluirán la noche del jueves 19 de enero dos auténticas damas de la escena, dos mujeres que en la veteranía de la vida y de su faceta profesional lucen majestuosidad y tablas suficientes para dar vida a una obra en la que la cruda realidad se sirve con pequeñas y precisas dosis de humor. Asunción Balaguer y Amparo Soler Leal, conocidas en el teatro y en la televisión por innumerables obras, serán hoy en la pieza de la compañía Albena Teatre y del dramaturgo, actos y director valenciano Carles Alberola, Sofía y Encarna, dos ancianas abandonadas en una residencia, dos caras en suma de una misma moneda, distintas pero complementarias. Ambas son el prototipo de dos maneras antagónicas de entender la vida. Una mediante la ficcionalización de la realidad, mientras que la otra gracias a una enorme capacidad de saborear el día a día, es decir, el segundo a segundo que le toca vivir. La puesta en escena de Carles Alberola en la que también tienen cabida otros actores como Silvia Marty (popular por la serie televisiva Un paso adelante) y Alberto Delgado, traduce ese aliento positivo, vital y divertido que habita en estas dos mujeres, un aliento que trasmite su esperanza en las nuevas generaciones y en un futuro que, aunque no sea más que un destino plagado de tempestades, es lo único que tienen. Esa intención que busca el autor de la pieza tiene una excelente traslación al escenario de la mano de dos grandes actrices como Amparo Soler Leal y Asunción Balaguer, dos mujeres por las que la vida, en este caso teatral, ha pasado con letras mayúsculas fruto de su notoria implicación en cada personaje que interpretan. Precisamente esa simbiosis entre personaje e intérpretes es destacada por el director de Al menos no es Navidad. «Desde un inicio supe que si algún día conseguía contar esta obra sería en clave de comedia debido al inmenso dolor que esconde. Uno de los enigmas que me empujaron a escribirla y, ahora a dirigirla como una comedia era entender como los ancianos, en las situaciones más dolorosas, cuando el paso del tiempo ha erosionado su cuerpo, ajado su rostro, reducido su vocabulario. A pesar de todo aún son capaces de sonreír y hacer reír, de ayudar a los demás, de mantener la ilusión en no se saben que, en definitiva, de desear seguir viviendo». Esa intención es la que ofrece una obra llena crudeza y a la vez de altas dosis de humor. Lugar: Teatro Bergidum Día y hora: Jueves 19 enero, 21.00 horas Precio: 10 y 12 euros