Cacabelos, Arganza o Villafranca están en el grupo 2 pese a su escasa vinculación con el carbón
Todos los núcleos agrícolas tendrán más incentivos industriales que Ponferrada
El Plan primará lo mismo a una nueva empresa en Barjas que en la principal área industrial del Bierzo
Con leves matices de color político todos los representantes de los grandes partidos en el Bierzo volvieron a coincidir ayer en el despropósito de la clasificación que Industria y los sindicatos han pactado para regular las ayudas a la creación de industrias en los municipios de la comarca. Nadie pone en cuestión la discriminación positiva que se produce con la consideración como muy mineros de los núcleos más ligados al sector del carbón. Son nueve y figuran en el grupo 1, en el que las iniciativas empresariales recibirán el máximo de la subvención -un 45% sobre la inversión-. La gran sorpresa es la discriminación de Ponferrada, que figura en el grupo 3, donde cualquier emprendedor recibiría por término general sólo un 25% del máximo de la subvención. Ponferrada, que ha sufrido durante 60 años la polución de la mayor escombrera urbana de carbón, las emisiones de la colindante térmica de Compostilla y la actividad, por ejemplo, de los lavaderos de la MSP, aparece en la misma categoría que alguno de los municipios más deprimidos e inaccesibles del Bierzo, como Balboa, Barjas u Oencia. Con las mismas facilidades a la hora de optar a las subvenciones empresariales del Plan del Carbón entran también buena parte de los municipios en los que ahora mismo se esta concentrando la mayor actividad industrial. Es el caso de Camponaraya, de Cabañas, de Carracedelo o de Toral, con polígonos en franca expansión. Por un criterio estrictamente geográfico municipios de tradición casi exclusivamente agrícola, como los de Cacabelos y Villafranca, donde no se conocen ni instalaciones carboneras, aparecen en el grupo 2. La instalación de industrias en estos términos recibiría del Plan del Carbón el 50% de la ayuda máxima sobre la inversión. Son municipios que junto a los de Congosto, Peranzanes, Candín, Castropodame y Palacios se equipararían en el tratamiento al de Cubillos, donde se ejecuta el macropolígono industrial del Bayo, que se ha planteado tanto desde la Junta -promotora del mismo- como desde la administración central como el gran polo de atracción de grandes compañías generadoras de empleo. Sobre una supuesta inversión empresarial de diez millones de euros en municipios como Cacabelos, Villafranca, Candín o Peranzanes, los promotores podrían recibir hasta 2,2 millones en subvenciones. En cambio, la misma iniciativa en Ponferrada, Camponaraya, Carracedelo, Cabañas o Toral sólo se beneficiaría de 1,1 millones, según los criterios generales del polémico listado. Saavedra y el PP En su doble condición de portavoz del PSOE en Ponferrada y de presidente comarcal, Ricardo González Saavedra, admitió «desajustes» en la clasificación, pero mitigó los lamentos del gobierno del PP en Ponferrada. «Es posible que haya algún desajuste con Ponferrada, y con otros municipios como Cabañas, Toral y Camponaraya, porque son lugares con polígonos fuertes que están en el grupo 3 de ayudas. Pero la decisión para corregir estos desajustes no es del PSOE, sino de un consenso de Industria, Acom y sindicatos. Trataremos de corregirlo, pero que quede claro que no es cosa del PSOE», corroboró. En cambio negó que Ponferrada pueda llegar a perder ayudas de hasta 60 millones de euros en este nuevo plan. Y se preguntó por qué ni la Junta ni Riesco han defendido mejor los intereses de la capital frente al reciente acuerdo, que aseguró que conocían con antelación. Además resaltó la catalogación de polígono del Bayo en el grupo 2. La comisión permanente del PP, sin embargo, cerró filas con Riesco y sus demandas y culpó al PSOE de tratar de discriminar a Ponferrada y a otros municipios de su contorno.