La derivación a otros centros podría ayudar a paliar un caos que ya es crónico

La ampliación en el área de Urgencias del Hospital debe servir para mejorar en parte la estancia y atención de los pacientes, pero como apuntó ayer el jefe del servicio, sería necesario ampliar el número de camas hospitalarias para que dicha solución fuera completa. La imposibilidad de llevar a cabo esta medida, al menos a corto plazo, podría ser paliada con la derivación de ciertos pacientes a otros centros en los que ser tratados y con ello evitar que la espera en algunos casos se traduzca en dos o tres días en los pasillos. Y es que de las casi 140 personas que acuden cada día al hospital, en este caso al servicio de Urgencias, con alguna afección 25 de ellos necesitan ser hospitalizados para realizársele un tratamiento más completo o en su caso proceder a determinadas intervenciones. Por ese motivo, y dado que las altas en la zona de hospitalización no son tan elevadas, en algunos casos la espera llega a los tres días, con los problemas de saturación que generan en el servicio en cuestión que afectan tanto al propio paciente y sus familiares como a los sanitarios y auxiliares que trabajan en Urgencias, una de las medidas que actualmente se baraja puede venir de la derivación a otros centros sanitarios de Ponferrada con los que existan convenios de colaboración, o en su caso establecer acuerdos futuros para que dicho problema, hasta que la ampliación de camas en el área de hospitalización sea posible, pueda subsanarse.