Diario de León

Con esta infraestructura y la reordenación de los accesos al área industrial aumentará la seguridad vial

Adjudicada la obra de la glorieta del polígono de Camponaraya en la N-VI

La rotonda costará algo más de 200.000 euros, será cerrada y tendrá seis proyectores de luz

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Marga Luengo - ponferrada
Ponferrada

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El Ministerio de Fomento ha adjudicado ya las obras de construcción de la glorieta del polígono industrial de Camponaraya, por un presupuesto que asciende a 204.401 euros. Se trata de una infraestructura muy necesaria y muy reivindicada por todas las fuerzas sociales dada la alta siniestralidad que se registra en ese punto de la circulación, considerado un punto negro de la provincia. Ayer el Boletín Oficial de Estado publicaba la adjudicación de esta infraestructura a la empresa Tecnología de la Construcción (Teconsa), que será la encargada de reorganizar los accesos y construir una glorieta cerrada en el punto kilométrico 391,5 de la N-VI, a la altura de Camponaraya. Las obras consistirán en convertir la actual glorieta partida que existe en la actualidad, que cuenta con carriles de cambio de velocidad de tipo directo y salidas hacia Camponaraya, el polígono y las naves adyacentes, en una rotonda cerrada que tenga similares dimensiones y que sea bien visible por los vehículos. Para ello, está previsto que ésta cuente con una columna cilíndrica en el centro dotada a su vez con una cruceta con espacio para un total de 6 proyectores de luz. Con este diseño se pretende obligar a los vehículos que circulan por este tramo de la Nacional VI a reducir su velocidad, consiguiendo de esta manera mejorar la seguridad en la zona. La glorieta dispondrá del mismo radio interior que la actual rotonda partida y se mantendrán las alineaciones de la N-VI tanto en planta como en alzado, así como la sección transversal de la vía con carriles de 3,5 metros y arcenes de 1,5 metros. Además, se conectarán los nuevos ramales de pluviales a la red existente en el polígono y se instalarán carteles de preaviso para los conductores en ambos sentidos de la circulación. También se colocarán bordillos elevados que dificulten el paso de peatones, con la finalidad de evitar que crucen la isleta central. Una vez finalizadas las obras, se repondrá la señalización horizontal y vertical, así como las defensas metálicas oportunas y todos los servicios que hayan sido afectados por la ejecución de la infraestructura.

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