El arte de la paciencia en El taller de Sarín

En un momento en el que la prisa, la rapidez en el trabajo y los resultados inmediatos priman en el mundo laboral, existe como contraposición remansos de paz que van ganando terreno. Es el caso del mundo del arte y la artesanía, en donde la meticulosidad y la labor hecha a conciencia sin mirar el reloj aportan una gran satisfacción final. Este es el caso de El Taller de Sarín, un centro ubicado en el bajo del número 27 de la avenida de La Libertad, en Ponferrada, donde allí se aprenden numerosas técnicas de artesanía en madera y pintura. Lo lleva Sarín, una mujer artesana especialista en acabados en madera y restauración de muebles y arte antiguo. También está especializada en pintura a mano sobre madera, aunque para consumo personal también practica el óleo sobre lienzo. Ver sus trabajos de pintura, sus códices en tablilla o en muebles es una verdadera delicia, pero más es apreciar el trabajo también didáctico. Todo está pintado a mano, utilizando la meticulisidad y la paciencia y echando mano de técnicas conocidas desde siglos y perfeccionadas con el tiempo. Sarín lleva diez años especializándose. Otro de los apartados que lleva su taller es el de la decoración en muebles. Los interesados pueden adquirir un modelo en crudo, y luego se trata con la mano de la paciencia y el saber. Aquí es donde Sarín aplica los acabados. Utiliza los acabados en barnizado, a la cera, decapé, con dibujos de todo tipo, utiliza el pan de oro y estilos al gusto. Así, pueden plasmarse estilos naif, rústico, imitando muy antiguo o modernista, entre otros. Cuando Sarín muestra su catálogo de trabajos y proposiciones, el abanico se amplía con la propuestas del gusto personal. Arte, meticulosidad y paciencia.