Torbellino Bisbal, botillo y bebida

«Bisbal, ¿Has probado el botillo?», le espetó a bocajarro un periodista nada más bajarse del Rolls. «No. Nunca. No me gusta la bebida». El torbellino de Bulería, Bulería y ex de la Chenoa creó el tumulto hasta rallar la histeria. Una mujer le saltó al caballito sobre sus caderas y él sin inmutarse. Antonia Dell' tte sí sabía que el botillo es un embutido y comparó el producto patrio con el carácter fuerte y arrebatador de los italianos. El paseillo de los famosos por la alfombra roja para entrar a la gala de los Micrófonos dio mucho juego. Paloma San Basilio, al ser preguntada por la marca de su vestido le pidió al periodista que le mirase la marca por dentro de él: Era de Maniella Borani. Rappell no pasó desapercibido. Iba vestido con una indumentaria que semejaba la prenda religiosa de un obispo, de verde y negro. Álguien le preguntó por los números de la Primitiva del sábado, pero contestó con una mueca y media sonrisa. José Manuel Parada llegó y mendigó un premio delante de las cámaras. «No entiendo cómo Del Olmo no me ha dado un Micrófono», dijo, junto a Pilar Tabares. Había muchas mujeres espléndidas, pero una se llevó la mirada de todos. esa fue María Jesús Ruíz, la que fue Miss España, que iba con DJ, el que fue novio de la Belén Esteban. Ismael, el que primero de Operación Triunfo, también desplegó su poderío mediático y arrancó más de un grito de pasión. A su traje marrón de rayas se agarraba una morena de metro ochenta. José María García recibió el aplauso cariñoso del público. El viernes le dieron el alta definitiva tras ser tratado de cáncer. «Antes miraba, pero ahora, hasta veo», dijo. Y por allí, camino de la gala entró con discrepción Adriá, el mejor cocinero del mundo y habló de maridajes culinarios. Y también Victorino Martín, que en esta ocasión para la afición, sin pintones.