Carriedo: «El culpable de la muerte del oso de Burbia debe pagar por ello»

El consejero de Medio Ambiente de Castilla y León, Carlos Fernández Carriedo, se mostró atyer «optimista» en cuanto al incremento de la población de oso pardo en la Comunidad, que cifró en un 70 por ciento en los últimos quince años, según informa Efe. En relación al ejemplar que apareció muerto de un disparo en la localidad leonesa de Burbia, el consejero confirmó en Segovia que el caso ha pasado a la Fiscalía y al Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) de la Guardia Civil. En conferencia de prensa, Fernández Carriedo dijo que «ojalá se pueda detener al culpable de este hecho, porque ha cometido un delito recogido en el Código Penal, al tratarse de una especia protegida en peligro de extinción, y debe de pagar por ello>. No obstante, el consejero explicó que «la evolución de la especie está siendo positiva pues, en quince años, se ha pasado a contabilizar de entre 60 y 80 ejemplares a una cifra que oscila entre los 105 y los 130, un 70 por ciento más». Para Fernández Carriedo, el oso pardo «no deja de ser una especie en peligro de extinción, pero somos más optimistas» en cuanto a garantizar su pervivencia. El oso pardo abatido de un disparo en las cercanías de la localidad de Burbia tenía cuatro años y pesaba más de cien kilos. Su muerte, según la necropsia realizada por el Centro de Atención de Animales de la Junta en Valladolid se produjo entre 24 y 72 horas antes de ser encontrado por dos excursionistas a unos cuatro kilómetros de la citada población berciana.