Saavedra sin rival en el PSOE
LO DIJIMOS aquí hace meses, y el tiempo lo corrobora. El secretario general del PSOE provincial, Miguel Martínez, lo que queda del sector de la estilizada diputada Charo Velasco, el secretario comarcal y alcalde de Camponaraya, Antonio Canedo y hasta los históricos y los críticos como Antonio Vega, Conrado Alonso... todos, no ven con buenos ojos que Ricardo González Saavedra sea el candidato a la alcaldía de Ponferrada. Y no tanto por él, sino como por el entorno que lleva consigo y que ahora «bebe» de las fuentes del Consejo Comarcal del Bierzo. Pero aún así, Saavedra tiene la partida ganada en la Ejecutiva Local socialista. En el posible caso de que se celebrasen primarias, se sabe que serían a modo de protesta, de señal de rebeldía, pero sin ninguna confianza en ganarlas. El poder del presidente del Consejo y su fuerte apuesta por el papel de primera espada como oposición en el Ayuntamiento de Ponferrada es tal, que a nivel provincial y comarcal no pueden con él, no encuentran, y mira que lo buscan, un candidato mejor que vender a la parroquia. Y en estas, tampoco acaban de confirmarlo como candidato porque aún aspiran a tener algún reducto por donde sesgar su liderazgo. El equipo de concejales no dice ni pío. Repetirán los más dóciles a Saavedra y el resto parece ser que serán gentes de su equipo y algún que otro pacto o concesión que finalmente se haga en el seno del PSOE. Ni relanzar al alcalde de Cubillos en Ponferrada, ni contar con un nuevo secretario general, ha servido para parar a Saavedra. Hasta Wenceslao, el secre por consenso en Ponferrada, se ha plegado al encanto de la esfinge saavedrina. Controlado el Consejo Comarcal, controlado el equipo de concejales en la oposición, en mayoría en la Ejecutiva y Asamblea de Ponferrada, a Ricardo José González Saavedra sólo le falta vencer la resistencia de Canedo y los barones provinciales. La clave están en no entrar en conflicto con los intereses, entiéndase, puestos, que pretendan seguir ostentando estos dirigentes. Y luego está, aunque lo dicen off the record, que se haga fuerte en Ponferrada siendo como es la asamblea más respetada, junto con las de León y Valladolid, de toda Castilla y León, por lo numerosa y por ser la histórica donde gobernó el PSOE en los peores tiempos del socialismo regional. En definitiva, y a pesar de que se lo ponen difícil, Saavedra no tiene rival en el PSOE de Ponferrada. Se acabó la disidencia.