El pesimismo se instala en la caravana de Edda Schneider

Hace hoy nueve días desde que Edda Schneider, una mujer alemana de 63 años, desapareciera en el paraje de las Médulas, sin que su marido, Burkard, consiga explicarse el cómo ni el por qué. Desde entonces, la caravana en la que el matrimonio pasaba unos días de vacaciones en la comarca del Bierzo, se ha convertido en el centro de operaciones de búsqueda y en el punto de encuentro de los vecinos de toda la zona del paraje romano, que no han dudado en volcarse con la familia, en unos momentos de dudas y de desesperación. Uno de los hijos de la pareja, Uwe, se unió a la búsqueda el pasado jueves. Ayer, pasada ya una semana desde que su madre desapareciera, reconocía a este periódico en un perfecto inglés que tanto a él como a su padre les cuesta mantener el positivismo. «Hemos buscado por todos los caminos y en todas las direcciones, por todos los rincones de las montañas y con la ayuda de todos los vecinos y de la Guardia Civil, y el hecho de que nadie haya visto nada nos hace no ser muy positivos», manifestó. En la caravana, ayudados por la solidaridad de los vecinos que les proporcionan comida, compañía y ayuda en la búsqueda, padre e hijo pasan las horas peinando todos los rincones de los montes, tratando de encontrar alguna pista que les ayude a localizar a Edda. Sin noticias hasta el momento, mantienen contacto con sus familiares en Alemania a través del móvil. Pero las obligaciones del trabajo reclaman ya a Uwe, que hoy tendrá que partir a Madrid para tomar un avión que le lleve de vuelta a Suiza, donde debe regresar al trabajo. «No sabemos muy bien qué hacer, porque tampoco podemos buscar eternamente», dice Uwe, «pero en principio mi padre permanecerá aquí hasta el jueves o el viernes y si no hay ninguna noticia volverá a Alemania para volver después, porque ahora está enfermo del estómago». No obstante, aunque el pesimismo está ya instalado en todos los que buscan a la mujer, la Guardia Civil convocaba ayer a todos los vecinos de los pueblos próximos para continuar la búsqueda en la jornada de hoy. La cita, a las 8 horas en el Lago Sumido.