R.E.V. puso la vida de su familia como garantía del trato y cada estafado adelantó 1.300 euros
Dos detenidos acusados de estafar a11 dominicanos ofreciéndolesempleo
La Policía arresta a una española de 24 años en Ponferrada por amenazar al supuesto empleador
La Comisaría del Cuerpo Nacional de Policía en Ponferrada, en una imagen de archivo
Les pedían 50.000 pesos a cada uno como adelanto -unos 1.300 euros- a cambio de un contrato de trabajo que las autoridades españolas ha terminado rechazado por sospechar que se trataba de un fraude. Agentes del Cuerpo Nacional de Policía en Ponferrada ha detenido a un vecino de la ciudad, R.E.V, de 50 años y supuesto empleador, y al ciudadano dominicano O.A.M.G, de 29 años y presunto intermediario, acusados de estafar a 11 dominicanos a los que prometían un empleo a cambio de dinero. La familia del empleador ha acabado recibiendo amenazas telefónicas desde la República Dominicana y desde la propia Ponferrada tras incumplir R.E.V. lo prometido y la Policía también ha detenido a una mujer de nacionalidad española, P.A.P, de 24 años, y pareja de un dominicano residente, como presunta autora de alguna de esas amenazas. Según informó ayer la Subdelegación del Gobierno, R.E.V. y O.A.M.G. viajaron a la República Dominicana y contactaron con varias personas ofreciéndoles la posibilidad de conseguirles la documentación necesaria para residir en España a cambio de 50.000 pesos que pagaban por adelantado, más otros 3.000 euros que debían entregar una vez en España. Ninguno de los once estafados ha llegado a pagar el segundo plazo porque no han podido abandonar su país después de que los responsables de la Subdelegación de Trabajo rechazaran los contratos presentados por el empleador por entender que R.E.V. no desempeña una actividad empresarial suficiente para dar trabajo a once personas, según ha podido saber este periódico. Se da la circunstancia de que la R.E.V. y O.A.M.G. ofrecían como garantía del trato al propio empleador, y «la vida de sus hijos y sus padres». Los familiares de R.E.V. habrían recibido llamadas telefónicas desde Santo Domingo amenazándole por incumplir los prometido. R.E.V. ya se encuentra en libertad con cargos después de declarar ante el juez de Ponferrada encargado del caso. Al margen de la supuesta estafa, el supuesto empleador se enfrenta a un delito contra el derecho de los trabajadores que está penando con entre dos y cinco años de prisión.