La calle Ortega y Gasset se abre al mirador del Sil

Ponferrada vivió ayer el derribo del último edificio que mantenía cerrada al río Sil la calle Ortega y Gasset, en el centro de la capital berciana. Con la adquisición del edificio y la finca colindante, el Ayuntamiento ha rescatado para la ciudad una superficie de 300 metros cuadrados que se convierten de esta manera en suelo público. El alcalde de Ponferrada, Carlos López Riesco, anunció que este derribo es la fase previa a la urbanización del entorno del mercado de abastos y la avenida del Sil. El proyecto inicial, que aún se encuentra en fase de redacción, contempla la construcción de una plaza que abra la calle Ortega y Gasset al mirador del río. De momento, la propuesta del regidor es que la plaza lleve el nombre de «Ciudad de La Coruña». Riesco destacó que este nombre atiende al parecido estético que esta zona de Ponferrada tiene con la zona de Cantones de la ciudad coruñesa, eso sí, «salvando las diferencias». «Bautizar la plaza con este nombre supone tender un lazo para estrechar las relaciones entre dos ciudades llamadas a ir de la mano en muchas cosas», apostilló el regidor ponferradino. Al tiempo, el alcalde manifestó que una vez liberado este espacio el siguiente paso es desarrollar el proyecto definitivo de urbanización, que, por su parte, confía en tener finalizado antes de que termine el año. Además, Riesco destacó que esta actuación «no se trata de un hecho aislado», sino que anunció que el Ayuntamiento está trabajando en la adquisición de edificios en desuso para su derribo. López Riesco señaló que es «fundamental» ampliar el suelo público «y más en ciudades como Ponferrada, cuyo casco urbano no tiene unas calles muy anchas».