El PP y el PSOE se enzarzan en un pleno por el nivel de la calidad ambiental

Era el de ayer, en Ponferrada, un pleno de puro trámite. La proximidad de las vacaciones de agosto flotaban en el ambiente. Sin embargo, los dos partidos políticos con representación municipal no se dieron ni una tregua en la confrontación política que vienen manteniendo desde hace tiempo. En los dos únicos asuntos de enjundia de la sesión, los portavoces del PSOE y del PP, (y también el alcalde en ocasiones), se enzarzaron en la dialéctica de posturas irreconciliables. El asunto que más discusión suscitó fue la aprobación de la declaración ambiental del Ayuntamiento, correspondiente al año pasado. Se trata de una serie de medidas adoptadas para que una firma de control de calidad conceda a Ponferrada la excelencia de calidad a la hora de prestar sus servicios medioambientales. Aquí se incluyen limpiezas de calle, vertederos, basuras y todo lo relacionado con la gestión medioambiental. El portavoz socialista Ricardo González Saavedra dijo que estaban de acuerdo con que el Ayuntamiento busque la mejora ambiental, pero con el equipo de Riesco en la alcaldía, a su entender, lo hacen «sólo para tener los papeles en orden». Y por eso consideran desde los bancos del PSOE que es «quedarse corto» y acusan a los del PP de promover esta actividad para la «autocomplacencia». Según Saavedra, sólo buscan resultados estadísticos, que luego no tienen incidencia en la calidad ambiental en todos sus campos. En este sentido echó en cara al PP que sólo se contemple la limpieza viaria y la utilización del uso del agua para las calles, pero falta dar respuesta a problemas como el uso del agua potable para el baldeo de calles, los problemas de agua en el río Oza o el vertedero de inertes. También quisieron sacarle los colores al PP por considerar que el Ayuntamiento ha ofrecido «mala información» sobre la contaminación atmosférica, y porque el parque de bomberos quede fuera del control ambiental, «porque no cumple los requisitos». El concejal Juan Elicio Fierro, que ayer ofició de portavoz municipal y también el alcalde Carlos López Riesco, trataron de hacerle ver a los concejales del PSOE la valentía de llevar al Ayuntamiento a un control que nadie exige, y que sólo busca mejorar y perfeccionar su gestión ambiental. Riesco llegó a poner en cuestión la capacidad de entendimiento de Saavedra cuando éste cuestionó la importancia que tiene el obtener certificados de calidad. «Las empresas con certificados de calidad, a las que les cuesta mucho conseguirlo, se acordarán de usted (de Saavedra), por decir que esos certificados sólo son papeles». Según Riesco, lo cierto es que se ha pasado en un año de 0% de los procesos de control ambiental al 80%, y esta cifra se mejorará.