El secretario del PSOE en Ponferrada dimite al suprimirse las primarias

A nueve meses de la elecciones municipales, el PSOE perdió ayer al secretario general de su agrupación en Ponferrada. Wenceslao Orallo presentó su dimisión irrevocable ante las direcciones provincial y regional del partido al fracasar en su propósito de que el candidato a la alcaldía se designase a través de elecciones primarias entre la militancia. La decisión del secretario local se desencadenó después de que la Comisión Federal de Listas del PSOE resolviera oficialmente el pasado lunes «suspender la celebración de elecciones primarias en relación con la candidatura de Ponferrada». En las cartas de renuncia remitidas a través de fax, Orallo apunta a los impedimentos de las ejecutivas provincial y regional a la celebración de primarias como uno de los motivos capitales para abandonar la secretaría. Aunque antes alude, textualmente, a «la falta de apoyo orgánico de la mayoría de los miembros de la comisión ejecutiva municipal». Y a renglón seguido, a «la falta de atención y apoyo orgánico sólido desde la dirección provincial». De los 27 miembros de la ejecutiva socialista de Ponferrada es cierto que en estos momentos Orallo apenas si contaba con el respaldo de dos o tres representantes de la misma. Solo y arrinconado El resto además, aun perteneciendo a las diversas «familias» que ahora mismo prestan su apoyo puntual a Ricardo González Saavedra como candidato a la alcaldía de la capital berciana, se encontraba muy molesto con Orallo por no convocar siquiera asambleas desde que iniciara su lucha por la autorización para la celebración de la primarias. «Ya estaba en la cuerda floja. Llevábamos tres meses sin vida orgánica por su culpa», comentó sin demasiado duelo a este periódico un significado integrante de una de las «familias» ponferradinas. Un tipo útil Wenceslao Orallo, de 49 años, es un reconocido profesional en el ámbito de la asesoría y del sector inmobiliario. Había tomado las riendas de la dirección local del PSOE el 23 de octubre del año 2004, capitaneando una lista de consenso que obtuvo el respaldo del 95% de la asamblea. Así se logró la integración de los sectores que giran en la órbita del incombustible Conrado Alonso Buitrón, de Pedro Nieto y del propio Ricardo González Saavedra. Sólo el grupo que se arracima en torno a Antonio Vega o Rita Prada se mantuvo al margen.