Un millón de euros en obras convierte al García Yebra en referente de calidad

Un millón de euros en obras y unos cuantos años para su ejecución han convertido al colegio Valentín García Yebra no sólo en un referente de calidad en la educación pública no sólo de Ponferrada sino de toda la comarca. El director provincial de Educación, Emilio Gutiérrez, lo reconoció ayer sin el menor titubeo con motivo de la entrega de las últimas actuaciones en el complejo. «Es el más completo», resumió. Aunque lo cierto es que buena parte de la financiación de las infraestructuras han corrido a cargo de las arcas del Ayuntamiento de Ponferrada. Por esa razón acudieron al acto el alcalde, Carlos López Riesco, y el concejal de Cultura, Manuel Rodríguez, junto al coordinador comarcal de la Junta, Fidel Cerezales, y el inspector Lalo Almarza. Con todo, el director de Educación admitió la cruda realidad. «A pesar de que hemos duplicado la oferta en este centro, este año no hemos podido cubrir toda la demanda de plazas». El García Yebra cuanta ahora con 400 alumnos y 25 profesores. Está integrando en el programa madrugadores, imparte gallego, dispone de comedor y los sábados funcionará como centro abierto para favorecer la conciliación familiar. «La demanda sigue en aumento», abundó Gutiérrez, «aunque hemos ampliado quince nuevas aulas». Flores a Riesco Tras revisar las instalaciones y el parque infantil que se ha culminado recientemente, el director de Educación tampoco reparó sus flores al alcalde. «Ojalá todos los ayuntamientos tuvieran un alcalde como el de Ponferrada», señaló en alusión a la «sensibilidad» que atribuyó a Riesco por mejorar con fondos municipales el estado de los centros escolares. El regidor correspondió a Gutiérrez destacando la colaboración de la Junta de Castilla y León a través de un convenio específico que en su opinión está deparando frutos estupendos. El responsable provincial de Educación comentó que intervenciones como las que se han desarrollado en el antiguo colegio de la MSP están en función de la demanda de plazas por parte de los padres y también de las posibilidades de espacio del recinto, que en el caso del actual García Yebra se cumplen con una amplísimo patio.