La opa más maquinada

El diccionario define maquinación como: «Proyecto o asechanza artificiosa u oculta, dirigida regularmente a mal fin». Todo ésto ha estado sucediendo en las opas de Endesa y digo de los medios en plural, porque por al menos han intervenido cuatro, el empresarial, el político, la representación de los partidos políticos y ciertos medios de comunicación, siempre intentando dañar a Endesa. La empresarial No hay nada más que ver el origen de la Opa de Gas Natural sobre Endesa, tan zafia y burdamente anunciada por su presidente Gabarró en Televisión Española, aunque como ha aparecido últimamente en la prensa, la operación fue diseñada por el presidente de Repsol, mayor accionista de Gas Natural, conjuntamente con Iberdrola. Para pensar lo peor. Estaba clarísimo, como el tiempo ha demostrado, que intentaban repartirse Endesa, expoliando a los accionistas de esta empresa, pagando una cantidad ridícula de 21 euros por acción, cuando actualmente ya se han ofrecido 35 euros, y encima la oferta era mayoritariamente en papel con acciones de Gas Natural. Visto lo que ha sucedido posteriormente con Repsol en Bolivia, y los problemas que ha tenido y tiene actualmente con el Gobierno de la nación boliviana, cabe la pregunta. ¿Ésta Opa no sería una huida hacia adelante como consecuencia de la situación en que se encontraba Repsol?. En cuanto a Iberdrola una empresa señora en el sector eléctrico, no se imaginaba uno una actuación tan ladina. Nunca ha dado la cara, permaneciendo en la sombra para dar el zarpazo y comprar 9.000 millones de euros de los activos de Endesa, para que Gas Natural pudiera económicamente hacer la operación, creciendo al mismo tiempo a costa de Endesa. Nunca se ha conocido una operación industrial tan aberrante como la que pretendía Gas Natural, vender prácticamente su valor en bolsa para coger otra empresa. Irritaron las manifestaciones del presidente de Fenosa, el señor López Jiménez, «aprobando» la Opa de Gas Natural, primero por respeto a Endesa de la que fue presidente y segundo porque también estaba pensando en coger parte de Endesa como por ejemplo el 30% que esta empresa tiene en la central térmica de Fenosa en Anllares. Todo el sector eléctrico quería repartirse la tarta. Tampoco pensaron que podían entrar en discordia más competidores como han sido E.On y Acciona. La política Igualmente claro es en estos momentos que la opa de Gas Natural se hacía con el consentimiento del Gobierno de la nación que tenía que pagar los peajes correspondientes a los nacionalismo vasco y catalán. En un principio la respuesta del Gobierno y especialmente de su principal valedor el anterior Ministro de Industria, el señor Montilla, era siempre la misma, que la operación estaba enmarcada dentro de una actuación empresarial y no política. Pero lo que nunca pensó el Gobierno y su entonces ministro de Industria, es que entrase en juego una tercera empresa, la alemana E.On. A partir de este momento se descubren las cartas, actuando el Gobierno intencionadamente mediante la promulgación de dos decretos Ley, uno perjudicando a Endesa desde el punto de vista tarifario, y otro dando competencias a la Comisión Nacional de la Energía, que no las tiene en este ámbito, para poder actuar. Como consecuencia de estas disposiciones la Comisión Nacional de la Energía dictó una durísima resolución con 19 condicionantes para poder llevarse a cabo la opa de E.On entre los que se encuentran la venta del 30% de la potencia instalada de Endesa, desmembrando la empresa, con la total oposición de sus trabajadores y municipios afectados. Ante las reclamaciones realizadas por Endesa y E.On a nivel europeo, la Comisión Europea de la Energía, resolvió el expediente incoado, anulando las 19 condiciones, dando un duro varapalo al Gobierno de España, por ir en contra de la legislación europea. Las últimas manifestaciones del nuevo ministro de Industria, el señor Clos, no son más que el derecho al pataleo, afirmando que todo es cuestión de interpretación y que acudirán a los tribunales europeos. Ante el acoso de la Comisión Europea de la Energía, y contradiciendo las palabras del actual ministro de Industria, el presidente del Gobierno se ha visto obligado a reunirse con la canciller Merkel para llegar a posibles acuerdos sobre la opa. Acuerdos que nunca se han conocido. Finalmente Acciona ha entrado en Endesa comprando el 10% de las acciones, intentando llegar al 25%, ofreciendo 32 euros por acción. Algunos comentaristas de la prensa sospechan de que el Gobierno está detrás de esta operación, pero la respuesta de E.On es rápida. Al día siguiente paga a 35 euros la acción. Toda la cohorte de abogados del Estado y consejeros del Gobierno, ante la situación que se ha creado, estaría mejor buscando soluciones positivas para el futuro de la opa en vez de dedicarse a poner trabas a la misma. Como que Endesa no pierda su personalidad jurídica en España con lo que los impuestos quedarían aquí, la obligación de que Endesa siguiese desarrollando sus planes medioambientales y de aumento de la potencia instalada, o que continuase ampliando y mejorando sus redes de distribución. Montilla apoyó una opa que se le ha vuelto en contra, porque abrió la veda para que los cazadores disparasen, sin mediar las consecuencias y será el culpable de que posiblemente Endesa sea alemana. Los portavoces partidistas Aquí cada uno ve la feria según le va en ella y otros cambian de idea según sopla el viento. Las últimas declaraciones del presidente del Consejo del Bierzo, González Saavedra, con motivo de la entrada de Acciona en Endesa son patéticas. Ya se había resuelto el problema para que Endesa siguiese en España. Pero no esperaba la reacción de E.On al día siguiente. Saavedra se ha opuesto o se ha callado a todas las mociones que en los distintos ayuntamientos se han hecho a favor de Endesa y en contra de las opas, pidiendo que no se desmembrase la misma, cuando ha sido su partido a través de la Comisión Nacional de la Energía el que ha dictado resolución en ese sentido. Con la opa de Gas Natural se limitó a decir que era una operación empresarial y no política, sin comentar el expolio al que se sometía a los accionistas como se ha visto a lo largo del tiempo. Cuando no le queda argumentación alguna lo más fácil es echar la culpa al PP. Pero de la situación actual en que se encuentra Endesa debería culpar al Gobierno, principalmente a su anterior ministro de Industria, señor Montilla, que apoyó claramente, en favor de los catalanes y los vascos, una operación sin medir las consecuencias que podía tener para el sector español. La comunicación Parece que hay medios que están esperando que surja algún acontecimiento para empequeñecer a Endesa, tratando de disminuir la importancia que tiene en el sector energético. En TVE, concretamente el día que ACS a través de Florentino Pérez tomaba el 6 % de Iberdrola, el presentador del Telediario, Lorenzo Milá, dejó entrever una fusión de Iberdrola con Fenosa, anunciando enfáticamente y con solemnidad que la segunda eléctrica de España más la tercera ya eran mayor que la primera. Milá, al afirmar que la tercera más la segunda son mayor que la primera, no atiende a la realidad porque no dice la verdad y mucho menos toda la verdad. La potencia instalada en MW de IB+UF es de 37.743 por los 45.908 de Endesa. La producción en GWH de IB + UF es de 127.067 y la de Endesa de 185.264. Los ingresos en millones de euros de IB+UF son de 17.837 por los 18.229 de Endesa, y el beneficio neto de IB+UF es de 2.205 millones de euros frente a los 3.182 de Endesa. La suma de IB+UF sólo supera en número de clientes a la de Endesa, pero con un ratio de consumo por cliente inferior. Pero además hay otra cosa muy importante, que Endesa está ampliamente posicionada en Europa (España, Francia, Portugal, Italia...) Marruecos y América (Perú, Chile, Colombia, Venezuela, Argentina, Brasil, etc...), así como en América central algo de que carece la suma de la segunda y la tercera, con lo que la expectativa de expansión es muy superior en Endesa, como está ocurriendo realmente. Algo que ignora, sin rectificar, el prestigioso señor Milá. La labor de Pizarro Sólo el señor Pizarro merece felicitaciones por la lucha que está llevando a cabo con sus colaboradores, en solitario, para salvaguardar los intereses de los accionistas que al fin y al cabo son los dueños de la empresa. Pizarro, como muchas veces ha dicho, cree en el proyecto de una empresa sola como Endesa. Como yo. Pero tampoco se puede dejar de tener en cuenta las alianzas que con toda seguridad se van a producir en el sector energético europeo.