López Riesco oficia una nueva boda gay

Aunque desde su partido la postura es claramente contraria a los matrimonios gais, el alcalde de Ponferrada no puso ayer reparos a oficiar el compromiso entre dos vecinos de Ponferrada, Joao y Carlos. Como hace 14 meses, el regidor del PP fue el encargado de casar a una pareja que sigue precisamente los pasos de Ramón y Luis cuando, allá por el 15 de octubre del 2005 decidieron que ya era hora de sellar sus vidas con un compromiso oficial. Ayer le tocó a otra pareja, al segunda que une López Riesco en el Ayuntamiento de gais con una normalidad que precisamente choca con las directrices de su partido, contrario a que este tipo de uniones sean consideradas como cualquier matrimonio entre dos heterosexuales. Ni el año pasado ni ahora en pleno mes de diciembre Riesco dudó en oficiar una ceremonia que en el caso de ayer fue de lo más sencilla, sin boato, pero con el cariño que se profesaron los dos contrayentes vecinos de Ponferrada cuya intención no era la de llamar la atención y por ello han llevado todo el proceso de una manera silenciosa, incluso evitando que las cámaras fotográficas o las de televisión fueran testigos de su enlace. Acompañados por cuatro personas y, eso sí, muy felices, Joao y Carlos se convirtieron ayer en la segunda pareja de gais que se casan en la capital berciana y también en la segunda en la que el alcalde Carlos López Riesco ha entendido que a pesar del llamamiento o consejo del PP, como máximo cargo del ayuntamiento que es y como vecino como los contrayentes de Ponferrada no existía pega ni reparo alguno para que fuera él, por el turno que le corresponde el encargado de hacer realidad la unión entre dos personas.