El PGOU de las 34.000 viviendas pasa el penúltimo asalto municipal

El Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) de Ponferrada superó ayer con éxito la penúltima tramitación en el ámbito político municipal. El documento elaborado tras el último periodo de alegaciones obtuvo el dictamen positivo de la comisión de urbanismo con el plácet mayoritario del PP y el voto en contra de la oposición socialista. El PGOU de las 34.000 viviendas y del AVE, el primero del siglo XXI en la capital berciana, se aprobará provisionalmente en pleno la próxima semana y luego se elevará a la Junta de Castilla y León para su aprobación definitiva. En la comisión informativa, como en convocatorias precedentes, no se produjeron demasiadas tensiones entre el grupo de gobierno y la oposición. Pero los representantes de uno y otro bando volvieron a transmitir públicamente las impresiones contrapuestas que durante más de año y medio han tratado de plantear socialmente. El concejal de Urbanismo, Juan Elicio Fierro, comentó en el terreno formal que el nuevo PGOU de Ponferrada ofrece «una distribución muy equilibrada de las bolsas de suelo y expansiva en los ámbito rústicos». También destacó la «malla» viaria que contempla para garantizar las conexiones entre barrios y pueblos, así como entre los núcleos rurales entre sí. Y en su opinión, en las antípodas de la del PSOE, el plan ha sido transparente en su tramitación, «en un proceso abierto y asambleario». «Se ha hecho además -agregó Fierro- una aprobación extra que es la segunda y ha pasado tres meses de información pública. A él han podido contribuir todas las personas que han querido participar». Para Fierro no cabe en modo alguno hablar tampoco, como se ha hecho desde las filas del Partido Socialista, de manejo alguno de información privilegiada. El concejal delegado de Urbanismo entiende que el PGOU no será fácilmente judicializable. «El documento creo que es intachable en su concepción y tramitación. Hemos intentado adoptar la mayoría de las garantías posibles. Pero esto es un mundo libre y cualquiera puede acudir a los tribunales», recapacitó. Fierro insistió en que es poco común que un plan de urbanismo, como en el caso de Ponferrada, tarde «más de dos años» en tramitarse si se tiene en cuenta el periodo de trabajos preliminares y la tramitación.