Ya tenemos presidente

AÑO NUEVO, añada nueva y presidente nuevo. El presidente del Consejo Regulador del Bierzo viene con la añada nueva debajo del brazo, una añada complicada por la meteorología, pero que según los expertos ha dado vinos muy concentrados y aromáticos. La elección del presidente fue como la añada, un poco complicada, después de la pataleta de las bodegas privadas, las que habitualmente venden muchas botellas y han internacionalizado la marca Bierzo y las otras que van al rebufo. Alfonso Arias es el nuevo presidente, y lo que ha costado. En estos momentos la denominación ya no está despegando, sino que se ha consolidado y ha crecido. Según las estadísticas se han vendido aproximadamente unas doscientas cincuenta mil botellas más que en el año dos mil cinco. Es una etapa importante donde debe prevalecer la unidad del interés común, y el objetivo de la estabilidad, para que todos podamos beneficiarnos de la buena imagen del Bierzo. Arias se enfrenta a la reforma nada fácil del nuevo reglamento, donde tendrá que conciliar los no siempre coincidentes intereses de las cooperativas y los de las bodegas privadas. Se enfrenta también al tema candente de los varietales foráneos, en el que espero impere el interés común y se defienda la identidad de la mencía sobre todas las demás castas, mal llamadas «mejorantes». Por el lado más científico, todo apunta a que se va a apostar por la creación de viñedo y bodega experimental, una idea muy interesante para poder estudiar la mencía y recuperar otras variedades locales menos conocidas. En definitiva, la elección ha sido acertada.