El viento se puso a cien

Ráfagas de viento de hasta cien kilómetros por hora azotaron a la comarca del Bierzo y dificultaron a la ciudadanía el tránsito por la calle durante toda la jornada de ayer. En Ponferrada, a más de un viandante se le dobló el paraguas y los que más lo sufrieron fueron los comerciantes ambulantes del habitual mercadillo al aire libre de los miércoles. Muchos tuvieron que plegar su mercancía, puesto que el viento les llevó su puestos. No había forma de amarrar los plásticos para librarse de la lluvia y del viento. Los que tuvieron trabajo a mayores fueron los bomberos, que estuvieron atendiendo numerosas llamadas de ayuda de la ciudadanía. Hubo servicios para retirar antenas de televisión, dobladas literalmente por el viento. También volaron persianas que quedaron mal heridas y fue necesario retirarlas con ayuda de los bomberos para evitar peligros mayores a los que circulan por la calle. Las fuertes ráfagas de viento y temporal e lluvia hizo de las suyas con los árboles. Por ejemplo, en la glorieta de Columbrianos, en una de acceso a la autovía del Noroeste, un árbol se vino abajo y fue necesario retirarlo para no impedir el paso a los vehículos. Y aunque llovió mucho, en San Miguel de las Dueñas se produjo un incendio en una vivienda. Los bomberos tuvieron que intervenir y la cosa no fue a más debido a la rápida intervención. Al final se quemó un saliente de la casa.