Clos otorga al proyecto de Ponferrada relevancia de «geopolítica mundial» Mejora de la sede y planta de oxicombustión

Si el proyecto de investigación y desarrollo que la Fundación Ciudad de la Energía está poniendo en marcha en Ponferrada triunfa, su relevancia será mundial y afectará a la geopolítica de primeras potencias como Estados Unidos, Japón y de centro Europa. El planteamiento pasa por lograr que sea un éxito la investigación emprendida sobre la captura y almacenamiento del CO 2 por la combustión más limpia del carbón. De esta forma, el mineral fósil, -del que el Bierzo cuenta con reservas abundantes para varias décadas-, volvería a recuperar el valor mundial que en su día tuvo. Estas ideas fueron defendidas ayer en la capital berciana por el ministro de Industria, el catalán Joan Clos, que viajó a Ponferrada con las ministras de Educación y Ciencia, Mercedes Cabrera, y de Medio Ambiente, Cristina Narbona, para participar en la reunión del Patronato de la Fundación Ciudad de la Energía, que dirige el investigador José Ángel Azuara. Por eso, el ministro Clos incidió en el hecho de la apuesta del Gobierno central en invertir para colocarse a la cabeza de este proyecto y ser referencia europea. De hecho, en la reunión del Patronato los tres ministros tuvieron conocimiento del programa de captura de CO 2 y la estrategia a desarrollar durante este año y por un plazo de cuatro más. El objetivo es lograr también que la instalación que se creará en el Bierzo, con la planta de oxicumbustión en Cubillos del Sil, sea una de las elegidas por la Unión Europea para demostrar los conceptos que permitirán el uso del carbón en la generación de energía eléctrica. En la reunión de ayer se acordó la incorporación al Patronato del Ministerio de Medio Ambiente. Cristina Narbona dijo que se implicarán de lleno en el proyecto, ya que participan y lideran ellos el programa del cambio climático, con el fin de reducir las emisiones contaminantes a la atmósfera. La ministra de Educación destacó por su parte el interés del Gobierno en la Fundación y en sus distintos planes de formación de expertos, el museo de la energía, la planta de oxicombustión y la recuperación del patrimonio industrial. La reunión de ayer del Patronato de la Fundación Ciudad de la Energía sirvió para ratificar varias cosas ya conocidas, como el proyecto de rehabilitación de la sede de la entidad, en las viejas instalaciones de Compostilla I, así como la compra de parcelas en el municipio de Cubillos del Sil para ubicar la planta de oxicombustión, con la que se investigará para la citada captura y almacenamiento del CO 2 producido por las emisiones tras la combustión del carbón para producir electricidad. El berciano, el primero Ante la polémica suscitada por la existencia de proyectos similares de investigación en Asturias y Aragón, el ministro de Industria dijo que Ponferrada es el que coordinará todo el plan y será el de referencia. La ministra de Educación, por su parte destacó que «no es negativo, sino muy positiva la investigación de un mismo campo en distintos lugares». Con todo, expresó que los proyectos de la Ciudad de la Energía de Ponferrada, el asturiano y el aragonés «son de dimensiones muy distintas». En el caso del proyecto berciano, se incluye el plan de transporte y almacenamiento geológico del CO 2 , la restauración ambiental de zonas degradadas por la actividad minera y la formación de científicos especializados en la materia.