Según Fierro, el nuevo plan triplica los metros de dotaciones públicas que la ley exige por habitante
El portavoz de la oposición en el Ayuntamiento insistió en que el nuevo PGOU no corrige la falta de dotaciones públicas que deberían haberse incluido en La Rosaleda o su entorno próximo. El concejal de Urbanismo, Juan Elicio Fierro, aportó datos muy distintos de este razonamiento. Indicó primero que el nuevo PGOU -que prevé unas 34.000 viviendas en los próximos dos o tres lustros- recoge una ratio de 13,75 metros cuadrados por habitante de equipamientos públicos, y de 13,79 metros por habitante de zonas verdes. «Y sin incluir el Morredero ni el Pajariel», matizó en alusión a las críticas recibidas desde los colectivos discordantes sobre la inscripción de ambos parajes como suelo verde. Bajo este enfoque, el edil delegado de Urbanismo recalcó que la ley exige cinco metros cuadrados por habitante y que por lo tanto el nuevo PGOU triplica esa obligación. Fierro, como luego el alcalde, también llamó la atención sobre la inexistente voluntad del Ayuntamiento de «birlar» ningún tipo de suelo público a la ciudadanía como lo demuestra el hecho de que cuando se modificó la edificabilidad de La Rosaleda, en la modificación del campus universitario se incorporaron nada menos que 347.000 metros cuadrados de equipamientos. Para los populares, si ambas modificaciones se hubieran tramitado como un todo, y no por separado, no existirían siquiera los problemas legales de este momento.