Lariviere pone a Carracedelo a la cabeza de la distribución pizarrera

La empresa francesa Lariviere lleva más de 40 años comprando pizarra en España a través de la planta que tiene en el Barco de Valdeorras y ahora quiere implantarse en el municipio de Carracedelo para ampliar su actividad con un centro de distribución que abrirá sus puertas el próximo mes de septiembre en Villamartín de la Abadía. Estas nuevas instalaciones se ubicarán en una parcela de 13.000 metros cuadrados, cerca del hotel Villamartín, y supondrán la creación de entre cinco y ocho puestos de trabajo directos. Una gran oportunidad para el desarrollo del municipio de Carracedelo que, en opinión de su alcalde, Raúl Valcarce, servirá para crear riqueza, empleo y asentar población en el medio rural, ya que este tipo de empresas suelen tener un «efecto llamada» para nuevos inversores. Además, aseguró que la implantación de esta nueva industria no sólo beneficia a Carracedelo sino a toda la comarca del Bierzo. En esta línea, el alcalde afirmó que Lariviere ya cuenta con la licencia de obras para que su puesta en marcha sea efectiva, tal y como está previsto, en el mes de septiembre. «Estamos animando a numerosas empresas para instalarse en el municipio dando todas las facilidades posible a su implantación», afirmó. En este centro no se realizarán actividades de transformación de la pizarra, aunque se espera que diariamente una veintena de camiones transiten por las instalaciones de Villamartín para dirigirse después a Francia, principal destino de Lariviere, dónde se dedican a la construcción de tejados y cubiertas. Por su parte, el director general de Lariviere para España, Jesús Flórez, señaló que con la apertura de la nave de distribución en Carracedelo se producirá «un incremento de dos o tres puntos en el ranking de exportaciones». Asimismo, señaló el proceso de expansión que está viviendo la sociedad francesa, que ahora tiene como objetivo ampliar su actividad en España y que en el país galo cuenta ya con una plantilla de más de 800 trabajadores. Así, Lariviere se presenta como una gran empresa que factura anualmente 50 millones de euros y mueve unas 80.000 toneladas de pizarra al año, procedente de yacimientos gallegos y bercianos.