«El Consejo es difícil de gobernar porque no acaba de madurar»
-Se habla de Jesús Esteban como candidato a Presidir Armi. ¿Está Usted interesado? -En política tengo todas mis expectativas cubiertas con la alcaldía de Bembibre. De hecho todos aquellos órganos de representación que se nos ofrecen al ayuntamiento de Bembibre los estoy distribuyendo entre los concejales en función de su especialización, pero tengo que reconocer que Armi podría ser una excepción porque el futuro inmediato de las cuencas mineras se va a jugar en el plan del carbón y en ese sentido nuestra presencia es necesaria y evidentemente cuanto más alta mejor. También hay que recordar que en este último mandato Bembibre no tuvo ninguna representación en Armi y sin embargo hemos conseguido todos los proyectos que hemos presentado. Aun así, por responsabilidad política, y si llegara a recibir la propuesta diría que si. -¿Qué hay de la posibilidad de que se condicione Bembibre a tener tan solo un representante del gobierno en órganos superiores? -Hemos estado ocho años sin ningún tipo de representación de Bembibre en otros organismos a nivel de partido por lo que tampoco sería excepcional que ahora tuviéramos dos. Creo que si piensan en mi para presidir Armi será por la convicción de que haga un buen papel sin interferir en ningún otro organismo. No creo que se nos plantee en ningún caso una elección desde el partido. -Hablemos del Consejo Comarcal. ¿Cómo lo ve en su calidad de ex presidente? -El Consejo Comarcal es el órgano de más difícil gobierno de los de representación municipal, porque no acaba de madurar. Creo que más que gestionar servicios concretos todavía tiene que emplear el tiempo en acarrear competencias. Creo además que la elección de Jose Luis Ramón para presidir el consejo es muy acertada y si tuviera que darle algún consejo es que se apoye en los consejeros que han formado parte del gobierno los pasados cuatro años y que repitan. -¿Qué haría usted de estar en la situación que actualmente se encuentra González Saavedra? -No vale pensar por otro. Hace cuatro años yo había ganado unas elecciones y tenía la promesa del secretario general de continuar en la presidencia del Consejo, por ello creí necesario organizar una revuelta. Ahora en condiciones peores no tiene sentido un enfrentamiento. Saavedra tiene que procurar salir lo más dignamente posible sin tensar la cuerda.