El juez levanta la paralización cautelar que recaía sobre la cantera de Rozuelo

La resolución judicial y la autorización emitida por la Confederación Hidrográfica del Norte (CHN) para ejecutar el camino en la franja afectada pone fin a todas las trabas administrativas para la puesta en marcha de la gravera de Rozuelo, proyectada por la empresa Graveras del Bierzo. La creación de una explotación de grava en dicha localidad, perteneciente al Ayuntamiento berciano de Folgoso de la Ribera, cuenta con un expediente que tiene una larga trayectoria y que ya obtuvo en abril de 2005 el visto bueno del departamento técnico de la Consejería de Medio Ambiente de la Junta de Castilla y León, y posteriormente el Ayuntamiento de Folgoso aprobó en pleno la concesión de la licencia de obra. Dicha licencia fue recurrida por la Asociación en Defensa de Tierra Seca, con la presentación de una demanda en la que se aseguraba que la citada licencia municipal concedida a Graveras del Bierzo, para la construcción del camino que unirá la futura gravera con el molino, presentaba irregularidades que podrían convertirla en ilegal, al tiempo que apuntaba otras deficiencias en el expediente. La resolución de esa demanda obligó a la paralización cautelar de las obras hasta la emisión de una sentencia definitiva. Sin embargo, la resolución judicial establece el levantamiento de la orden de paralización, autorizando la continuidad de las obras hasta la puesta en marcha total del proyecto. La empresa ha logrado salvar también el último requisito administrativo que ha ralentizado la puesta en marcha de la cantera, la autorización de Confederación Hidrográfica del Norte para la ejecución del camino que une la explotación con el molino y que se encontraba, en parte, bajo la afección de la CHN.