«Se va a iniciar una muy gorda, en la cual algunos saldremos despedidos» Dialogante y respetado
El portavoz de los voluntarios de Cruz Roja de Ponferrada, Luis González, aseguró, en declaraciones a este periódico, que, a pesar de la resolución dada por el presidente nacional, Juan Manuel Suárez del Toro, ellos van a «seguir con las medidas de presión» por lo que consideran una «actitud antidemocrática» que va a ser el detonante de algo «muy gordo», llegando incluso a hablar de despidos. Luis González aseguró que los voluntarios de Cruz Roja no creen que «esta sea la solución para el conflicto generado en Ponferrada» y que «en ningún momento se ha escuchado la voz» de los que son la base de la ONG: los voluntarios. Además, el portavoz pide a las distintas instituciones, sea el caso del Ayuntamiento de Ponferrada, el Consejo Comarcal o la Diputación de León, que soliciten «en su nombre una justificación de la medida que han adoptado». A las 20.00 horas de ayer, tuvo lugar una reunión en la que los voluntarios de Cruz Roja en Ponferrada abarcaron la actual situación y decidieron qué hacer ante el nombramiento del secretario regional de Asturias, Juan Carlos González Álvarez, como nuevo delegado especial y la consiguiente destitución de su presidente, José Luis González. Los más de 30 voluntarios que han permanecido encerrados en la sede de Compostilla se sienten indignados por una decision que «no toma en consideración» lo que ellos piensan y no están de acuerdo con que se les imponga «un señor que viene de fuera de la comarca». José Luis González, médico y ex-cirujano, es por preparación un gran conocedor del medio en el que se desenvuelven los servicios de la Cruz Roja. Ligado en el ámbito público a círculos socialistas ha mostrado un talante dialogante con los ejecutivos del PP que le ha granjeado notables ayudas o la actual sede. Por ello es respetado y apreciado entre los voluntarios. | r.a.