Magaz anima al comercio del centro a asociarse ante la inauguración del Rosal

En poco más de dos semanas, el 23 de octubre, Ponferrada abrirá un nuevo centro comercial cerrado, El Rosal. Ante esta nueva atracción comercial, los más de 500 comercios del centro de la ciudad están a la expectativa y los más de 200 comerciantes asociados al centro comercial abierto La Cebra han decidido ponerse manos a la obra y contrarrestar el tirón del Rosal. Ayer, la concejala de Comercio de Ponferrada, Teresa García Magaz, animó especialmente al medio millar de comerciantes de la zona centro a asociarse a La Cebra y avisaba de lo que podría llegar si no se adoptan medidas, aún cuando entiende que pueden perfectamente convivir los dos polos comerciales. Según la concejala, «el comerciante es consciente de algo nuevo», y la tendencia en otras ciudades estima que siempre ha sido «un parón en el comercio tradicional de ciudad ante la apertura de un centro comercial cerrado», y que en el caso de Ponferrada «no tiene porqué ser menos». Pero, entiende también que el comercio de la capital berciana está muy bien establecido, es moderno y «está a la última», y por tanto hay una oferta comercial muy buena y puede convivir perfectamente «el uno y el otro». Por eso, ante la nueva situación considera que al pequeño comercio no le queda otra que crear una asociación fuerte. Como ejemplo dijo que en Palencia, el centro comercial abierto comenzó con 70 socios, y el de Ponferrada, La Cebra, partió con más de 120 y está ya por encima de los dos centenares. «El comercio de Ponferrada ha tomado conciencia de que algo hay que hacer, y en esta vida de continuos cambios, si no hay una asociación fuerte, uno solo por libre, poco puede hacer», dijo Magaz. «En ningún momento tiene que haber competencia fuera de lo normal y pueden convivir los dos centros comerciales; y éste, el abierto del centro, es más nuestro, porque es más tradicional», concluyó la responsable municipal. Por la asociación de comerciantes habló ayer Abel Ángel Macías y dijo que el comercio siempre está «preocupado, porque siempre hay competencia». Por eso, dice que no es bueno el comercio se confíe y con La Cebra adoptan iniciativas para atraer y mimar a los clientes. Lo atractivo de este comercio será por precio y calidad del servicio.