La Policía Local comprobará si los vehículos a la venta en los aparcamientos son de particulares
Riesco anuncia medidas para frenar a las mafias que venden coches en la calle
«La Ley está para cumplirla», afirma el regidor, sensible a las quejas de los concesionarios
Vehículo en venta aparcado en las inmediaciones del Museo del Ferrrocarril de Ponferrada
El alcalde de Ponferrada, Carlos López Riesco, anunció ayer que el Ayuntamiento adoptará «las medidas oportunas» para frenar a las mafias que venden coches en la calle como si fuera de particulares haciendo la competencia a los concesionarios de automóviles. Después de que los dueños de las empresas que comercializan automóviles nuevos y de segunda mano se hayan quejado a la Concejalía de Comercio de la proliferación de grupos organizados que usan los aparcamientos como escaparate y sin pagar ningún tipo de impuesto municipal, el regidor aseguró que el Ayuntamiento «realizará comprobaciones» para saber hasta que punto los vehículos estarían a la venta a través de una red. «Las leyes están para cumplirlas», advirtió Riesco en el cuartel de la Guardia Civil, durante el transcurso de las celebraciones de la fiesta patronal del cuerpo armado. Los propietarios de concesionarios de Ponferrada consideran que están sufriendo una competencia desleal por parte de verdaderas mafias y además de solicitar ayuda al Ayuntamiento, han pedido la intervención de Hacienda y la Seguridad Social. Un portavoz de los afectados, adscrito a la Federación Leonesa de Empresarios, ha asegurado que se dan casos en los que se llega a traer a Ponferrada vehículos de otras provincias para colocarlos en lugares públicos donde ponerlos a la venta. Cuando algún peatón se ha interesado por alguno de los automóviles, los vendedores ilegales suelen insistir ofreciendo incluso otros vehículos que todavía no se encontrarían en la ciudad y que estarían dispuestos a trasladar a Ponferrada. Los dueños de concesionarios denuncian que los grupos organizados tienen en ocasiones la desfachatez de colocar los coches a la venta delante de los propios establecimientos legales, para tratar de captar a la clientela de sus negocios. Una situación similar ya se dio en Madrid, donde se ha conseguido frenar la venta ilegal de automóviles en la calle, de ahí que los propietarios de los concesionarios hayan pedido al Ayuntamiento que siga el ejemplo de la capital e intervenga en el asunto.