Una gran familia minera
Centenares de mineros de León y Palencia participaron en la fiesta de convivencia de las cuencas carboneras en la localidad de Toreno. Un día para el recuerdo y el reencuentro de compañeros de tajo
Un compañero de tajo no se olvida, se convierte en un amigo con el que se comparten miedos, bromas y esos sabrosos cigarros con la cara y los labios tiznados de negro. Es ese recuerdo y es ese reencuentro el motivo de la fiesta de convivencia de las cuencas carboneras que bajo el nombre «Mineros 2007» organiza la FIA-UGT. En esta segunda edición, el escenario elegido por el sindicato ha sido el Campón de Toreno y hasta allí se desplazaron ayer cientos de mineros -jubilados, prejubilados y en activo- de León y Palencia para participar en una jornada que comenzó con una misa en la iglesia parroquial de la localidad berciana, cantada por el orfeón de Sestao, que emocionó a los asistentes. Entre ellos, el homenajeado Guillermo Sánchez, un hombre de 70 años natural de Toreno, cuyo compromiso con el sector del carbón y su papel en la lucha sindical en los primeros años de la democracia fue destacada por el secretario general de la FIA-UGT, Manuel López. Para un emocionado Sánchez, el reconocimiento del sindicato y de su compañeros supone el premio a toda una vida marcada por el trabaja en la mina, con sus escapadas a Francia o Suiza con la esperanza de encontrar un futuro mejor. Pero siempre volvió a las entrañas negras de su tierra. El Campón se convirtió después en una pista de baile, entre tapas y tapas de pulpo en una comida compartida por la gran familia minera.