La Junta pondrá en funcionamiento la depuradora dentro de dos meses

La depuradora del Bierzo Bajo estará funcionando en un plazo aproximado de dos meses, después de que la Junta de Castilla y León y la Confederación Hidrográfica del Norte (CHN) alcanzaran ayer un acuerdo para desbloquear la puesta en servicio de una instalación que ha costado 63 millones de euros y que lleva parada más de un año desde el final de las obras. La reunión que mantuvieron en Valladolid la consejera de Medio Ambiente, María Jesús Ruiz, y el presidente de la CHN, Jorge Marquínez, no pudo acabar mejor. La Junta asumió la responsabilidad de financiar el coste de la entrada en funcionamiento del complejo situado en Villadepalos derivando medio millón de euros a la Mancomunidad que forman Ponferrada, Camponaraya y Carracedelo, que se hará cargo de la gestión después de un periodo de seis meses a cargo de la administración autonómica. La CHN, por su parte, se comprometió a apoyar técnicamente la entrada en funcionamiento de la instalación y a diseñar el programa de mantenimiento y redactar el reglamento de vertidos que guiará la futura gestión mancomunada. Tras escuchar a Marquínez, que insistió en la operatividad de la planta depuradora, Ruiz quiso enviar un mensaje de tranquilidad a los tres ayuntamientos, que recibirán la instalación «con la garantía de que todo está en perfecto estado». La consejera estima que la depuradora estará funcionando en un plazo aproximado de dos meses, tiempo necesario para contratar al personal de la instalación y aprobar el presupuesto necesario. «Seguramente, se contratará la puesta en marcha desde la Mancomunidad, a la que derivaremos el dinero, y por un periodo de tiempo que irá más allá de los seis meses, para que no vuelva a haber un parón», anunció. Ruiz se reunirá la próxima semana con los tres alcaldes para agilizar la contratación de la empresa.