Diario de León

Zapico denuncia que el supuesto beneficiado es familiar de un ex concejal y militante del PP

El PSOE acusa a Riesco de «regalar» una calle de Columbrianos a un vecino

Reprochan al alcalde que archivara la sanción por cerrar el vial y legalizara la ocupación en el PGOU

Ponferrada

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El grupo municipal socialista de Ponferrada acusó ayer al alcalde, Carlos López Riesco, de «regalar» una calle de Columbrianos a un vecino de la localidad vinculado familiarmente con un ex concejal y militante del PP. El concejal del PSOE que controla la gestión urbanística del equipo de gobierno, Alberto Zapico, reprochó al regidor que en octubre del 2005 archivara por decreto el expediente sancionador contra el vecino de Columbrianos por cerrar el vial público con un portón, a pesar de que los técnicos municipales proponían una sanción de 6.015 euros, y legalizara la supuesta ocupación en el nuevo Plan General de Ordenación Urbana calificando el terreno, de tres metros de ancho por 25 de longitud y a la altura del número siete de la calle Hospital de Peregrinos, como espacio privado. «Denunciamos los suculentos regalos que el señor Carlos López Riesco entrega a sus correligionarios políticos», afirmó Zapico en rueda de prensa. El edil del PSOE evitó difundir el nombre del vecino de Columbrianos supuestamente beneficiado, o el de su familiar que fue concejal del PP y sigue siendo militante de la formación. «Cuando nos denuncien por difamación, entregaremos al juez el nombre y los apellidos», ironizó. Zapico insistió en que el terreno en cuestión ha sido «una calleja» durante cuatro décadas, según le habrían informado otros vecinos de la zona, y aseguró que quien denunció los hechos ante el Ayuntamiento porque el cierre del vial le impedía acceder a una finca, también presentó en el 2005 un recurso contencioso administrativo contra el decreto del alcalde que todavía está pendiente de resolución. El edil socialista resaltó que para argumentar el archivo del expediente, el regidor sólo usó un informe de la Policía Local en el que el supuesto infractor explicaba que se había limitado a cambiar un portón que existía desde hacía seis años, pero obvió el dictamen de los técnicos municipales, que proponían la sanción por infracción urbanística grave. Para el edil, Riesco se limitó a asegurar que la situación denunciada era sólo un problema de servidumbre de paso. Además del antiguo PGOU, Zapico exhibió ayer mapas del Catastro donde el terreno en cuestión aparece como vial público, y del nuevo PGOU, donde ya figura como espacio privado. «El Ayuntamiento de Ponferrada parece un cortijo de Riesco, que entrega o regala partes de ese cortijo a sus correligionarios», resumió el edil del PSOE. «Ponferrada parece un cortijo de Riesco, que entrega o regala partes a sus correligionarios» ALBERTO ZAPICO Concejal del PSOE en Ponferrada

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