Presidente y vicepresidente de la Mancomunidad de Ponferrada se reunieron ayer con Marquínez
Valcarce y Canedo piden 5,6 millones a la CNH para mejorar la potabilidad del agua
Presentado un plan para arreglar la situación de los núcleos descolgados de la depuradora Dob
Imagen del nuevo cartel de la estación de trenes de Ponferrada
El presidente y el vicepresidente de la Mancomunidad de Municipios de Ponferrada, Raúl Valcarce y Antonio Canedo, respectivamente, presentaron ayer al responsable de la Confederación Hidrográfica del Norte (CHN) un doble plan para mejorar la potabilidad del agua en todos los pueblos del contorno de la capital del Bierzo, y de otro lado para evitar que los núcleos que no se favorezcan de la nueva estación depuradora de aguas residuales de Villadepalos se queden sin sistemas de saneamiento. El primero de los proyectos presentados al presidente de la CHN, Jorge Marquínez, tiene un presupuesto de 5,6 millones de euros. Con esta cantidad, según pudo conocer este periódico, la Mancomunidad podría intervenir en la renovación de la vieja potabilizadora que ahora mismo funciona en Cubillos y que no garantiza unas condiciones de calidad todo lo óptimas que serían deseables en el suministro a miles de vecinos de los ayuntamientos de Cabañas, Sancedo, Camponaraya, Cacabelos, Arganza, Carracedelo y también de parte de Ponferrada. El presidente de la Mancomunidad, Raúl Valcarce, así se lo explicó al responsable de la CHN en busca de financiación para cubrir el mencionado presupuesto. Aunque también se ha acudido ya en la misma línea a la Junta de Castilla y León para hacer realidad la modernización de la potabilizadora. El otro plan que ocupó la agenda de trabajo ayer por la tarde en la entrevista entre Valcarce y Canedo con Marquínez está valorado en 3,5 millones y su objetivo es que a través de pequeñas depuradoras o fosas sépticas los pueblos que no disponen de conexión directa con la Edar de Villadepalos cuenten con un mínimo saneamiento y además no se expongan a las sanciones que se impondrán a todos aquellos municipios que no cumplan cuando antes con la depuración de sus aguas sucias. Marquínez se comprometió a estudiar ambos planes, aunque la cuenca berciana pasará a medio plazo a depender de la nueva Confederación Hidrográfica Miño-Sil.