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El portavoz socialista municipal evita aclarar su futuro y el de los otros tres ediles sancionados

Saavedra guarda silencio con medio grupo suspendido y coge vacaciones

Ninguno de los cuatro ediles había recibido ayer la notificación de la Ejecutiva Federal

Saavedra, entre Alberto Zapico y Emilia Fernández (también suspendida), en un pleno municipal

Ponferrada

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Habrá que esperar a que acaben las fiestas de Pascua para saber cómo afectarán las suspensiones de militancia de cuatro concejales socialistas de Ponferrada, incluyendo al portavoz, Ricardo González Saavedra, a la actividad del principal grupo de oposición municipal. Saavedra, que ayer viajó fuera de la ciudad para disfrutar de unos días de vacaciones, guardó silencio a pesar de los requerimientos de los medios de comunicación para que se pronunciase sobre la decisión adoptada por la Comisión Ejecutiva Federal, y perdido el pulso que mantenía con la dirección comarcal y provincial del partido, dejó en una incógnita el futuro del grupo municipal que encabeza. Es de esperar que después de la Semana Santa, y a la espera de que las notificaciones oficiales del PSOE lleguen a cada uno de los afectados, Ricardo González Saavedra aclare su futuro político y el de los miembros del grupo sancionados con dos años de suspensión de militancia por ausentarse de un pleno del Consejo del Bierzo en su condición de consejeros comarcales; Emilia Fernández, Carmen Doel y Javier Campos. Saavedra, que ayer no respondió a las llamadas de este periódico, ya había asegurado al comenzar la tramitación del expediente disciplinario que no tenía intención de dejar su cargo de concejal en caso de que fuera suspendido o expulsado del PSOE. Saavedra cobra una dedicación exclusiva del Ayuntamiento en su condición de portavoz del grupo socialista. La Comisión Ejecutiva Federal decidió el martes adoptar medidas contra Saavedra por respaldar a los seis consejeros que se ausentaron del Pleno comarcal en agosto pasado dejando en minoría al equipo de gobierno socialista de José Luis Ramón; junto a los tres representantes ponferradinos, el alcalde de Cacabelos, José Manuel Sánchez y el teniente de alcalde de Toral de los Vados, Sergio García -todos suspendidos también por dos años-, además de la otra consejera de Cacabelos, la independiente elegida en las filas del PSOE, y por lo tanto sin carné del partido, María Victoria Castillo. Los seis mostraban su disconformidad con el reparto de responsabilidades y las asignaciones del organigrama comarcal. El sexto expedientado por el PSOE es el procurador autonómico Pedro Nieto, que llamó «sin vergüenza» a Saavedra por no dimitir de su cargo de secretario local, como había anunciado, tras las elecciones municipales que perdió como candidato a la Alcaldía. El silencio del portavoz municipal y el de sus compañeros suspendidos en el grupo socialista, en cualquier caso, no fue el único que resonó ayer en el PSOE. El secretario comarcal, Antonio Canedo, con quien Saavedra había mantenido un enfrentamiento cada vez más notorio, tampoco habló ayer.