Diez equipos comenzarán el lunes la prospección para detectar fuego bacteriano
Diez equipos de técnicos de la Junta de Castilla y León comenzarán lunes en el Bierzo las prospecciones en las plantaciones de frutales para certificar que no existe propagación de fuego bacteriano, y en caso de detectarla, aislarlo para erradicar la enfermedad por completo. En la comarca hay una superficie de 3.300 hectáreas de frutales y todas ellas serán revisadas a lo largo del próximo mes de junio para evitar que la plaga se propague y arruine las plantaciones. Cada uno de los diez equipos estará integrado por un ingeniero, , y un capataz y entre todos «peinarán» las plantaciones de frutales de pepita, (principalmente manzana y pera) para determinar cualquier síntoma de fuego bacteriano. Si se sospecha de ella, se tomarán muestras que se remitirán al laboratorio de referencia hasta conocer los resultados, y si los mismos dan positivo, el arranque de la plantación y la quema de los árboles será inmediata. Según explicó ayer a este diario Antonio Losa, el responsable provincial de Sanidad Vegetal, departamento dependiente de la Consejería de Agricultura, la campaña para testar las plantaciones «será más intensiva en las localidades donde el año pasado ya se encontró brotes de fuego bacteriano». Técnicos de la UE Julio Rodríguez, el jefe del servicio de Sanidad, de la Dirección General de Producción Agropecuaria de la Junta, estuvo ayer también en el Bierzo con técnicos de la Unión Europea (UE) para verificar sobre el terreno que se ha cumplido la normativa. De este modo se tratará de erradicar allí donde se ha dado esta plaga en los frutales. La delegación mencionada ya estuvo visitando ayer, según pudo conocer este periódico, una finca afectada en Arganza y otra en Posada del Bierzo.