Viñas del Bierzo vende suelo para pagar una reforma de 800.000 euros

Los más de mil socios de la cooperativa vinícola Viñas del Bierzo, de Camponaraya, celebraron ayer asamblea extraordinaria y en ella se puso de manifiesto la situación actual ante la fuerte inversión de 800.000 euros para una serie de mejoras en la modernización de todas las instalaciones. Esos 800.000 euros se quieren pagar de dos formas, o bien que corran directamente el coste a cargo de cada socio, o bien intentar obtener los fondos necesarios a través de la venta de patrimonio de la propia cooperativa, que en este caso serían unos terrenos de gran valor situados junto a la carretera que conduce al polígono industrial de Camponaraya. Así las cosas, el presidente de la cooperativa Viñas del Bierzo, Vicente Barrio, en informes de la presidencia dio cuenta a la asamblea de socios de la situación. Y la misma es la siguiente la inversión de 800.000 euros se ha realizado en una serie de obras y mejoras muy necesarias e imprescindibles para la marcha del negocio. Con esa inversión se acomete la nueva instalación eléctrica de toda la cooperativa, y en el presupuesto se incluye igualmente la instalación del transformador. Se compran también más depósitos de acero inoxidable para la fermentación de los vinos y también el almacenaje de los caldos. Con la inversión anunciada también se hace de igual forma frente a la compra de prensas nuevas para la vendimia. Además, también se aplicará un sistema nuevo de frío para la fermentación, así como la tolva de acero. A todo ello habrá que añadir la adquisición de una despalilladora de los racimos, también para la época de vendimia, así como la renovación de todas las bombas que impulsan el vino a los diferentes depósitos. La fuerte inversión va acorde con el plan de profunda restauración y modernización de la cooperativa. El planteamiento que se hizo para la venta de terrenos pasa por sacar al mercado unos 4.000 metros cuadrados que Viñas del Bierzo tiene en sus instalaciones, de una parcela de 24.000 metros. Se trata de un terreno muy bien situado, con 130 metros de fachada a la carretera que da al polígono industrial de Camponaraya. La asamblea de socios facultó a la dirección para ver si en el plazo de unos «seis meses, uno o cinco años» se vendan los terrenos e ingresar por ellos no menos de 600.000 euros, unos cien millones de las antiguas pesetas. De no ser así, la otra opción es la ya conocida de descontar a cada socio dinero para pagar la inversión procedente de cada temporada de vendimia.