Los vecinos de Oencia rechazan el agua de la Diputación y beben de las fuentes

Ni sin arsénico ni con él. A los grifos del pueblo de Oencia no se les escapa ni gota. Desde ayer el agua está cortada. La mayoría de los vecinos no saben si ha llegado o no el camión con las garrafas de agua que la Diputación provincial reparte para el consumo, después de que los análisis del suministro realizados por la Junta detectaran un nivel de arsénico en el agua cuatro veces superior al permitido por la Unión Europea. Los vecinos del pueblo de Oencia protestan porque nadie les informó del corte de agua ni de que el vehículo de la Diputación repartiría garrafas. Un camión del Parque Móvil provincial se acercó ayer al pueblo, aunque tal y como confirmó el responsable de Fomento, Jaime González, «se repartieron muy pocas garrafas porque los vecinos prefieren beber el agua de sus fuentes». Desde la Diputación también se informó de que los vecinos «están desinformados» y que el camión regresará el lunes con más garrafas, ya que el reparto es de cinco litros de agua por persona y día. Poca información El alcalde de Oencia, José Estanga, anunció ayer que la junta vecinal ha encargado un contranálisis a unos laboratorios de Ponferrada y que la Junta de Castilla y León realizará nuevas tomas para comprobar si existen altos índices de arsénico en el resto de las captaciones y en las fuentes que abastecen a los cien vecinos que residen en la localidad. El alcalde apuntó que los resultados de todos los análisis que se realicen tardarán, al menos quince días en saberse. Los vecinos del barrio de arriba de Oencia, como Dolores Cadórniga o Manuel Fernández, aseguraron que el camión de la Diputación no llegó hasta esa zona del pueblo. Sin embargo, Teresa Pombo sí que reconoció que prefería beber el agua de las fuentes del pueblo antes que la de las garrafas. Todos coinciden, sin embargo, en confirmar que no sabían que el camión del parque provincial se iba a acercar al pueblo. Algunos de los vecinos tienen pozos particulares de los que se abastecen ahora ya que el agua está cortada. El que no tiene, como es el caso de Dolores Cadórniga, tiene que pedírselo a algún amigo para poder realizar tareas tan básicas como beber o fregar y cocinar. Un nuevo vehículo provincial El diputado de Fomento anunció ayer que el ente provincial se está planteando la posibilidad de adquirir un nuevo camión cisterna para estos casos. De hecho, González declaró que esta situación «tardará en resolverse». El popular aseguró que a partir de ahora, «en cuanto haya varios meses de sequía, las captaciones de los pueblos se verán afectadas, por lo que es necesario que la Diputación esté preparada». En Oencia se detectaron 37 microgramos de arsénico por litro, cuando lo permitido son diez.