Peñín enloquece con los nuevos blancos

Las biblias que guían a los amantes del vino de calidad por las sendas del buen gusto seguirán hablando maravillas del Bierzo. El periodista José Peñín, uno de los críticos nacionales de referencia y autor de la Guía Peñín de Vinos, se confesó ayer subyugado por la añada 2007 de la D.O. berciana. Peñín, acompañado por uno de sus ayudantes, examinó durante unas intensas ocho horas en Cacabelos cerca de 120 referencias de las cincuenta bodegas que forman parte del Consejo Regulador. Y no titubeó al adelantar que en la próxima edición de su guía, que orienta desde los gustos más sibaritas a los más pedestres, la cosecha 2007 aparecerá con una calificación de excelente. Por delante de La Rioja, Ribeira Sacra o Ribera del Duero. Aunque a su juicio, el gran salto de calidad se observa en los blancos. «La gran sorpresa 2007 son los godellos, bueno, los blancos en general, y eso que el Bierzo siempre ha tenido como mascarón de proa el tinto mencía. Son blancos con suficiente maduración y frescura. Son godellos con buena sensación. También los tintos 2007 son vinos de buena estructura y mucho cuerpo. Es una cosecha que cuando esté en barrica dará el pecho», vaticinó. Además auguró un prometedor porvenir para los crianzas más clásicos. En la sede del Consejo Regulador de los Vinos del Bierzo, en Cacabelos, el presidente, Alfonso Arias, no ocultaba su satisfacción por las sensaciones que le había transmitido José Peñín. «Estamos encantados de que cualquier venga a catar nuestro vinos. Pero es que la guía de Peñín es una de las referencias para el consumo de vino en este país y uno de las más consultadas», subrayó Arias, que recordó que hace ya unos años que la eclosión de los blancos bercianos se veía venir.