Los detenidos por el crimen del taxista declaran ante el juez en Ponferrada

Sobre las diez de la mañana llegaron a los juzgados de Ponferrada los dos detenidos por el asesinato del taxista José Miguel Alves el pasado 20 de agosto en Las Ventas de Albares. Custodiados por los agentes de la Guardia Civil y separados en dos furgones, los acusados prestaron declaración ante el juez del juzgado número 4 hasta pasadas la una y media de la tarde. Al ser trasladados por los guardias civiles desde el juzgado a los furgones, aparcados en la parte trasera del edificio, tan sólo el más joven de los detenidos, P.R.A., se tapó la cara con una carpeta poco antes de subirse al vehículo. El mayor, F.D.G., salió en segundo lugar y a cara descubierta. F.D.G. y P.R.A. ya habían prestado declaración ante el juez de Cistierna por un presunto atentado contra la autoridad, ya que en el momento de su detención F.D.G. encañonó con su arma a los guardias civiles que requirieron su identificación en el mercado de la localidad de la montaña oriental el pasado jueves. Hasta ayer, cuando F.D.G., de 49 años y natural de Oviedo, y P.R.A., nacido en Bembibre y de 30 años, declararon ante el juez de Ponferrada, permanecían incomunicados en la cárcel de Mansilla de las Mulas y hasta que se inicie el proceso permanecerán en prisión preventiva. Está previsto que la asociación de taxista se persone como acusación particular, como ya anunció el presidente de la asociación ponferradina, Raúl Jato, el pasado viernes. El mayor de los detenidos en Cistierna por el crimen del taxista ponferradino en Las Ventas de Albares acumula en su historial delictivo cinco homicidios, una violación tres atracos y ochos robos y está presuntamente acusado de ser el autor material del asesinato de José Miguel Alves. y tiene condenas firmes en cinco audiencias provinciales: Oviedo, Cáceres, Badajoz, Murcia y León. Uno de sus primeros delitos lo cometió en la localidad cacereña de Hervás, donde mató a un taxista, por lo que fue condenado a prisión en 1979. Primera declaración Durante su declaración ante el juez de Cistierna, F.D. G. negó ser el autor material del asesinato del taxista de Ponferrada, tras su detención por los agentes de la Guardia Civil, a los que supuestamente encañonó con el mismo arma que se usó para asesinar a Alves en la madrugada del miércoles 29 de agosto. La última vez que se vio al taxista ponferradino fue a las 22.30 horas del martes, cuando salió de la estación de autobuses de la capital berciana para acudir a un servicio. Su turno finalizaba a las 23.00 horas. Sobre las cuatro de la madrugada del miércoles, un camionero que circulaba por la Nacional VI alertó a la Guardia Civil al descubrir el cuerpo sin vida de José Miguel Alves. El hombre, de 34 años, tenía un disparo en la cabeza y la brigada judicial de León comenzó entonces a investigar las numerosas pistas que aparecieron en el lugar de los hechos como pisadas y el casquillo, del calibre 6,35.