El teatro de calle triunfó entre los niños ayer en el casco antiguo

La plaza del Ayuntamiento fue ayer el punto de mira de muchos niños y mayores al acoger en su seno a las cinco compañías teatrales que participaron en el festival de teatro de calle, que este año cumple su séptima edición. Los niños impacientes se agolparon, ya por la mañana, en la plaza para ver las divertidas funciones. La primera compañía en actuar fue El minutero, que con su espectáculo El gato del retrato, entretuvo a cientos de niños hasta la hora de comer con juegos como puzzles, buscar las diferencias, colgar el gorro o el Mr Potato gigante. También por la mañana la compañía Fuman interpretó su obra Musicólogo, donde los espectadores eran llamados continuamente a participar en el espectáculo. La tarde comenzó con el representación Motors» a mano de la compañía itinerante Industrial Teatrera, que salió de la plaza del Ayuntamiento en dirección a la de la Encina, donde terminó su recorrido. Luego la compañía Buenas Noches, Buena Suerte interpretó en la plaza del Ayuntamiento su obra Le petit cabaret . El festival se dio por concluído con la representación A cuadros de la compañía itinerante Vagalume. La función discurrió entre las plazas del Ayuntamiento y de la Encina. En ella sus componentes se convirtieron en un grupo de escoceses cuya misión era buscar al fantasma que se había escapado del castillo de su pueblo. Niños y mayores pudieron disfrutar y reir con las divertidas obras que las compañías de calle representaron para entretenimiento de todos ellos.