Veinte voluntarios darán apoyo a los enfermos de cáncer y a sus familiares

A partir del próximo 16 de octubre las personas ingresadas en el Hospital del Bierzo por padecer algún tipo de cáncer y sus familiares recibirán el apoyo «extra» a los cuidados asistenciales que les proporcionan el personal sanitario. Un grupo de veinte voluntarios formados por la Asociación Española contra el Cáncer (Aecc) completarán la atención a estos enfermos oncológicos en su aspecto psicosocial, cubriendo no sólo las necesidades de los pacientes sino también sirviendo de alivio a los cuidadores principales. «Este programa redunda en la mejora en la atención de los pacientes», subrayó el director gerente del Hospital del Bierzo, Alfonso Rodríguez-Hevia, quien ayer suscribió con los responsables de las juntas provincial y local de la Asociación Española contra el Cáncer, Serafín de Abajo Olea y Concepción Blanco, el convenio que permite la puesta en marcha de esta iniciativa, que desde hace ya varios años funciona también en el complejo asistencial de León. Y es que el trabajo de estos voluntarios supone un importante respaldo psicológico para enfermos y familiares, que tienen que hacer frente a esa «crisis emocional», apuntó De Abajo, prácticamente inevitable cuando la palabra «cáncer» entra a formar parte de la vida de una persona. «Es una actividad humanitaria, de apoyo a los cuidadores», señaló el responsable de la Aecc en León, quien subrayó que «siempre apoyando y nunca sustituyendo». En principio, los voluntarios prestarán sus servicios en horario de mañana y en función de su disponibilidad, aunque en caso necesario y si alguna de las personas que forman parte del grupo estuviera dispuesta atenderían alguna petición particular para ayudar en otros horarios. Así, será la coordinadora de la asociación la que organizará a los voluntarios en función de las necesidades que haya dentro de los pacientes oncológicos del centro. Por otro lado, Rodríguez-Hevia informó que junto al programa de voluntarios el Hospital está creciendo para atender las necesidades de estos pacientes con la contratación de un nuevo oncólogo y la apertura a finales de año de una unidad de cuidados paliativos. La atención a estos enfermos se verá completada con la puesta en marcha del área de oncohematología, un importante salto cualitativo en la calidad asistencial.