Ponferrada ingresará 10 millones por la ampliación de la concesión del agua

En medio del vendaval económico que sopla en contra de las administraciones locales por la reducción de ingresos derivados de la caída de la construcción y también por el estrangulamiento de la financiación desde la Administración central, el Ayuntamiento de Ponferrada puede encontrar en el agua potable un enorme balón de oxígeno para sus arcas. El consistorio ponferradino y por ende la ciudad se pueden topar con una inyección de hasta los diez millones de euros dentro de los presupuestos para el año que viene, que se contemplan como los más restrictivos en muchos ejercicios para la mayoría de las instituciones públicas. El equipo de gobierno del PP y la concesionaria del servicio de distribución de agua potable, Aquagest, pueden empezar a negociar un canon fijo del orden económico ya mencionado por la ampliación de la concesión en dos ámbitos. De un lado en el del número de clientes, y de otra parte -fundamental para la obtención de dicho canon- por la extensión del número de años disponibles para poder seguir disponiendo de la privatización. El gobierno que encabeza el popular López Riesco ya había valorado en los presupuestos de este mismo año unos ingresos de alrededor de nueve millones de euros a cuenta de la renegociación de la concesión. Esa cifra se puede hacer efectiva durante el 2009 y aún algo más allá cuantitativamente una vez que se han cumplido dos condiciones esenciales. De un lado, el Ayuntamiento ya dispone de una nueva red de abastecimiento desde el pantano de Bárcena que está funcionando en pruebas de forma totalmente correcta. De otra parte, esta nueva infraestructura ha permitido al ejecutivo local sellar esta misma semana la salida de Ponferrada de la Mancomunidad de Municipios que suministraba a un buen número de ciudadanos de la periferia -barrios y pueblos- y también a complejos como el propio Hospital del Bierzo ante la insuficiencia de caudal de la vieja traída del Oza. En esta coyuntura, el grupo de gobierno dispondrá aún de varios meses, hasta que burocráticamente se dé por cerrado el abandono de la Mancomunidad, para discutir la ampliación de la concesión con la actual titular, Aquagest. La privatización del servicio de agua potable en Ponferrada se realizó en 1997 y fue a parar a manos de Ferroser por 25 años y la aportación de un canon inicial fijo de mil millones de las antiguas pesetas. Por lo tanto a la actual concesión sólo le quedan por delante otros trece años de explotación. El tiempo que se añadirá a la explotación y la valoración del número de usuarios potenciales que se sumarán a la lista de clientes de Aquagest serán las principales bazas en la nueva negociación. Agua bendita y escepticismo Además, desde la óptica empresarial, jugará un papel muy relevante la posibilidad de revisar las tarifas, lógicamente al alza, -aunque no en todos los casos-. Con lo que sí partiría seguro Aquagest sería con los 8.000 usuarios más que hasta ahora recibían el agua de las redes de la Mancomunidad -en realidad unos 4.000 nuevos abonados-. Los nueve o diez millones de euros sobre los que puede girar la negociación serían un revulsivo excepcional para la caja del consistorio ponferradino ante la perspectiva de un notable bajón en los ingresos que se avecina. El portavoz del PSOE, Fernando de la Torre se mostró ayer muy escéptico sobre la posibilidad que que el Ayuntamiento logre ese canon y aventuró que será a costa del bolsillo del ciudadano. «La retirada del transformador no sólo es una cuestión de estética, es por seguridad» CARLOS LÓPEZ RIESCO Alcalde de Ponferrada