Los responsables ferroviarios se reunirán tras las quejas vecinales
Renfe y el Adif buscarán una salida al problema de las locomotoras
Los vecinos llevan días denunciando los ruidos y la contaminación de los mercancías
Locomotora de mercancías estacionada ayer en la estación de Renfe y con los motores encendidos
ponferrada
Responsables de la compañía Renfe y del Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (Adif) se reunirá en breve para buscar una solución al malestar que está generando entre los vecinos de la estación de Ponferrada los ruidos y la contaminación de las locomotoras diésel que calienta sus motores a partir de las seis de la mañana.
Un portavoz de Renfe confirmó ayer que la compañía, de quien dependen las locomotoras, ha recibido estas Navidades las quejas de los vecinos de la plaza de Fernando Miranda y del entorno de la estación de trenes y ya está trabajando para buscar una salida. La compañía, que no deja de recordar que las maniobras de las locomotoras forman parte de la actividad normal de una terminal ferroviaria, consultará con el Adif para tratar de evitar las molestias. Renfe, sin embargo, prefirió no adelantar si la solución pasará por un traslado de las locomotoras a una vía muerta para que caliente sus motores fuera del casco urbano de la ciudad.
El propio alcalde de Ponferrada, Carlos López Riesco, ha asegurado que se dirigirá a Renfe para que tome medidas y corrija la situación. El alcalde, que ha hablado con algunos vecinos afectados, entiende que si el problema es reciente y las locomotoras no molestaban antes a los residentes en la zona, la compañía podría volver a la situación anterior.
Los vecinos también han encontrado apoyo en la Plataforma Bierzo Aire Limpio, que ha instado al Ayuntamiento a actuar y ser consecuente con su política medioambiental denunciando la contaminación acústica y los humos procedentes de la maquinaria.
Las locomotoras diésel llegan a estar dos horas calentando motores, entre las seis y las ocho de la mañana, según los vecinos.