Baldeón insta a la gerencia para que mejore la comunicación con la parte social pero descarta despidos
Carlos Díez Valdeón y Alfonso Rodríguez Hevia en una foto de archivo
«Puede haber situaciones de discrepancia pero lo que yo entiendo que no debe faltar nunca en una empresa de estas características es una falta de comunicación entre los representantes de los trabajadores y la dirección del centro, y esto es lo que le he transmitido a la gerencia. Pero no es cuestión de que nadie venga exigiendo de la noche a la mañana la dimisión de todo». Con estas palabras, el gerente del Sacyl, Carlos Díez Baldeón, ha querido poner fin a los enfrentamientos que se vienen produciendo en el seno interno del hospital, especialmente si se tiene en cuenta que afectan a unos 2.000 empleados.
Para Díez Baldeón es inadmisible llegar a la situación de desencuentro que existe actualmente en el complejo asistencial berciano por la supuesta falta de información, y asegura que esto podría solucionarse con un simple intercambio de datos sobre el devenir y el estado de diferentes gestiones del centro, una labor que -”asegura-” no le corresponde a la Gerencia Provincial, sino al gerente berciano, Alfonso Rodríguez Hevia. «Tenemos que trasladar la responsabilidad de una situación concreta a quien la tiene, es decir, el interlocutor para los problemas del hospital es el equipo directivo del mismo, no la dirección provincial».
La buena relación entre junta de personal y dirección es fundamental para el buen funcionamiento del complejo asistencial. Esta es la idea que intenta transmitir el gerente. «La comunicación a través de los representantes es totalmente necesaria para que el resto del colectivo se mantenga informado sobre determinadas cuestiones», apuntó.