El delegado del Gobierno estima que en dos meses habrán solucionado los desprendimientos
Galicia y León coordinarán medidas contra el colapso del desvío de la A-6
Estudian la opción de trasladar las rutas de los transportes especiales por la N-120 a Monforte
ponferrada
Las delegaciones del Gobierno en Galicia y en Castilla y León se coordinarán para adoptar medidas que eviten el colapso del desvío por la N-VI de la Autovía del Noroeste, cortada al tráfico entre los kilómetros 415 y 420 por el derrumbamiento de un talud en la Sierra de La Escrita, en el límite de los municipios bercianos de Trabadelo y Vega de Valcarce. Responsables técnicos de la Guardia Civil de Tráfico, de la Jefatura Provincial de Tráfico, la Unidad Territorial de Carreteras del Ministerio de Fomento ya tienen previsto reunirse en la mañana de hoy con el subdelegado del Gobierno en León, Francisco Álvarez, para buscar soluciones a los atascos que generan en el tramo de la N-VI el tráfico de camiones y de transportes especiales. Las propuestas que se pongan sobre la mesa para reducir la intensidad de la circulación y mejorar la seguridad vial se coordinarán con los responsables del tráfico en Galicia, según confirmaron ayer fuentes de la Subdelegación.
El propio delegado del Gobierno en Castilla y León, Miguel Alejo, adelantó ayer que la Subdelegación adoptará «medidas para causar las mínimas molestias» al tráfico desviado por la carretera nacional mientras los técnicos de Fomento buscan una solución a los desprendimientos en el talud del kilómetro 418 de la A-6.
Una de las opciones que estudian los responsables del regular el tráfico sería desviar los transportes especiales -“el traslado de palas de aerogeneradores por la N-VI está creando problemas debido a la dificultad para maniobrar con los camiones-“ por una ruta alternativa a través de la N-120, desde Ponferrada a Monforte de Lemos, o incluso por Sanabria a través de la A-52.
Fuentes de la Delegación del Gobierno en Galicia confirmaron ayer que se negocia con León para adoptar una medida conjunta, pero la decisión todavía no está tomada, ni se adoptará de forma urgente. En Galicia, de cuya Demarcación de Carreteras depende el tramo berciano de la A-6 afectado por el desprendimiento, se han puesto en lo peor y esperan tener solucionado el problema creado por la inestabilidad de la Sierra de La Escrita de cara al verano.
Alejo avanza un plazo
El delegado del Gobierno en Castilla y León, se atrevió, por su parte, a hablar de «un plazo de mes y medio o dos meses» para resolver el problema del talud de la A-6. La mayor preocupación a corto plazo, reconoció Alejo, es garantizar la fluidez de la circulación por el desvío.