Aparecen decenas de coches pinchados en Cacabelos tras una noche vandálica

Mientras la mayoría de los vecinos de Cacabelos dormían, la villa del Cúa padecía ayer jueves una madrugada vandálica. Decenas de coches, cerca de medio centenar según algunas fuentes oficiosas, amanecieron los neumáticos pinchados. Algunos vehículo hasta con las cuatro ruedas dañadas. La acción se desarrolló probablemente durante las primera horas de la madrugada, porque según fuentes policiales hacia las 02.30 horas algún propietario ya pudo observar los desperfectos en su automóvil. Pero nadie parece haber visto nada ni a nadie con seguridad. Aunque la huelga prevista en los institutos había provocado la noche del miércoles una presencia de jóvenes algo inusual para una jornada lectiva. Las oficinas de la Policía Municipal de Cacabelos y sobre todo el cuartel de la Guardia Civil se vieron concurridísimos ayer desde primera hora de la mañana de ciudadanos quejosos y ansiosos por presentar denuncias. «Aquí ha venido un señor que acababa de gastarse 600 euros en un juego nuevo de neumáticos y al que le han pinchado los cuatro», comentó un agente local a este periódico. Las ruedas de los coches agujereadas aparecieron indiscriminadamente por toda la villa del Cúa. En el centro, en los alrededores de la iglesia, y en las afueras. En la carretera de Carracedelo y en torno al cementerio. Los autores se debieron tomar, según las primeras pesquisas, varias horas a pesar de que el casco urbano de Cacabelos es el de un municipio de 5.000 habitantes. En medios oficiales, a tenor de las denuncias presentadas, se calcula no obstante que los coches con las ruedas pinchadas no pasarán de finalmente de los cuarenta. Los vándalos también se cebaron con varios contenedores de residuos y lanzaron al río diversas vallas de obras.