Reportaje | m. j. alonso
Con digideridoo al Fiestizaje
La iniciación en el uso del instrumento de los aborígenes australianos fue sólo una de las actividades del festival villafranquino, que hoy llega a su fin
Una de las citas más esperadas del verano en el Bierzo llegó ayer a su punto álgido. Ritmos africanos, batuka y samba, funky, percusiones o flamenco callejero. Diversos estilos musicales agrupados por la misma realidad, el Fiestizaje de Villafranca, organización por la Asociación Juvenil Bumtaka.
Cientos de personas se agolpan durante todo el fin de semana en la playa fluvial del municipio, donde se han levantado los dos escenarios que acogen las actuaciones -”Son Estrella Galicia y Burbia-”. La fusión de la música electrónica con instrumentos de percusión y la flauta travesera de los madrileños Munduka Beat abrió las actuaciones de la tarde, seguidos de los cánticos religiosos de Hare Krishna y el flamenco pop de los gaditanos Potahje.
El yin y el yang, el nexo de unión entre el día y la noche corrió a cargo de Bloco do Baliza, una agrupación de samba y batukada que hicieron de cabeza de pandilla para, a ritmo sabrosón, arrancar a la gente del escenario de tarde y llevársela al Burbia, donde a partir de las once menos cuarto de la noche el americano Kwame&Afrovibes Band y los senegaleses de Dunyakelen tomaron el relevo de la fiesta hasta altas horas de la madrugada.
Pero en un festival que se precie no sólo de música viven hombres y mujeres. Los concursos fotográficos, el mercadillo o los talleres de percusiones africanas, papel reciclado y digideridoo -”instrumento utilizado por los aborígenes australianos-” completan la oferta cultural de un encuentro que hoy llega a su fin y que se consolida entre las preferencias de los jóvenes. Casualmente este año coincide con el FIB.